«El emprendimiento de impacto es la mejor inversión posible en nuestro tiempo»

«El emprendimiento de impacto es la mejor inversión posible en nuestro tiempo». Así de rotundo se ha mostrado Antonio Miguel, fundador de Maze Impact, fondo de capital riesgo que ya ha apoyado con 45 millones de euros a 36 empresas «que logran su beneficio ofreciendo soluciones a los retos sociales o medioambientales. Son modelos de negocio en los que el impacto y los ingresos se retroalimentan, se refuerzan mutuamente».

Eso es lo que se conoce como 'startups' de impacto, empresas de base tecnológica que, sin dejar de lado la obtención de beneficios, centran sus esfuerzos en afrontar retos como paliar las consecuencias del cambio climático o las desigualdades sociales. «Es el mejor momento para poner en marcha proyectos de impacto», subrayó Miguel antes de enumerar las cuatro ventajas que este tipo de empresas tiene para los inversores.

La primera es el tamaño del mercado. Es decir, la envergadura de desafíos como la gestión de residuos, el ahorro energético, el acceso a los servicios de salud o la educación... «Si tienes una empresa que ayuda a resolver un problema de esta magnitud tienes una gran oportunidad y esas soluciones ya están apareciendo. Por ejemplo, estamos oyendo constantemente que la Inteligencia Artificial va a cambiar el mundo y ese es también el objetivo de las empresas sociales», aseguró.

Las otras tres ventajas están relacionadas con la «mayor capacidad de atracción de las empresas preocupadas por el desarrollo de su entorno». Para empezar, porque logran más fácilmente la conexión tanto con el público como con el cada vez más reñido talento que comparte esos mismos valores. Pero, además, porque se alinean desde ya con un público, el de las generaciones más jóvenes, socialmente más responsables que sus mayores.

Temas

• B-Venture