Rahm lanza su primer aviso
Con una tarjeta de diez bajo par en el campo Norte lidera y se queda a un golpe del récord de ese recorrido en el Farmers de San Diego
Entrega una tarjeta de diez bajo el par del campo Norte de Torrey Pines y la sonrisa tarda en aflorar en su rostro. Inagotable su ... ambición, ayer Jon Rahm estuvo muy cerca de armar el taco en el inicio del Farmers Insurance Open. Le funcionó de maravilla el putter. Ni que decir tiene que ello fue posible, además, porque su juego de tee a green fue trazado con tiralíneas. Y aún así se le escaparon otros cuatro hoyos que pudo cobrar. El semblante le cambió cuando ya tuvo las cámaras delante y reconoció que el punto de partida de su contundencia hay que buscarlo en el driver, en salidas larguísimas bien prolongadas con los hierros.
Ni que decir tiene que un buen comienzo siempre ayuda, aligera la mochila de la presión. Y esta vez clavó un eagle en el 10, el primer hoyo que jugó. Los pares 5 los tiene marcados este año como referentes para conseguir grandes resultados. Son los tramos del campo más favorables, en líneas generales para la resta, y con el que se estrenó ayer en La Jolla correspondió a una ejecución de manual al presentarse a tres pasos de la bandera en dos golpes. Bestial. Se vino arriba y los siguientes objetivos los rozó. En el 11 dejó la bola colgando del agujero y en el 12 su primer putt se quedó a palmo y medio. Así que no causó extrañeza que no tardara en seguir rebajando su tarjeta. Sendos birdies en el 14 y 15, éste un par 3, y remate de lujo, de escándalo del trayecto de ida con su segundo eagle en el 17 (par 5) y birdie en el 18.
Siete bajo el par del campo en nueve hoyos hicieron que atención, cámaras y aficionados acudieran en masa a seguir al jugador de golf de Barrika. Lideraba la jornada, pero no conseguía abrir brecha porque los Cauley, Knox, Rose, Pam, Howell III y Ghim hacían la goma y nunca se alejaban a más de uno o dos golpes, provocando incluso empates múltiples. Mención especial para Dough Ghim, único amateur en 2018 que superó el corte en el Masters y reciente vencedor del Ben Hogan Award que reconoce al mejor jugador universitario, trofeo que reposa en las vitrinas de Jon Rahm en Scottsdale por partida doble.
La segunda vuelta del día nació narcotizada para los intereses del vizcaíno. Tres pares y un bogey al irse la mano en la atalaya de la bandera 3. El bogey se lo tomó como el aviso para meter una marcha más y volver a trufar de agresividad su juego. Pleno. Birdies consecutivos entre el 5 y el 8 y el que restaba se le fue por un mal bote que le impidió llegar de dos impactos a green. Con -11 habría igualado el récord del campo.
«He sacado un buen provecho en los pares 5 y en mi juego de drive, que aquí es fundamental. Saliendo bien y con buenos hierros, me he dado muchas opciones», dijo Rahm.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión