Viadero: «Me parece gol legal, no creo que haya falta por ningún lado»

Pese a haber tuteado a un rival de entidad y con más presupuesto que el Lugo, la sensación que invadió a todos los verdinegros a la salida de Las Llanas fue la de rabia y pesadumbre. El Sestao River conoció por primera vez la derrota esta temporada (0-1) y lo hizo en el primer partido ante su público, ya que la primera jornada se disputó a puerta cerrada. Aunque ese vacío interior no sólo fue causa del resultado. También fue consecuencia de un tanto de Efremov justo antes del descanso, que el colegiado anuló considerando que el defensa central había hecho falta sobre el zaguero rival, al saltar para rematar de cabeza.

Ángel Viadero indicó en la rueda de prensa posterior al encuentro que «me parece gol legal, no creo que haya falta por ningún lado». El entrenador cántabro ya había visualizado la acción posteriormente y añadió que «Antón entra en el salto potente, el rival se le mete debajo y me parece gol legal». Asimismo, el técnico lamentó al respecto que «es una pena porque había sido un golazo y nos habría permitido ir al descanso con el empate, un poco más tranquilos, sin asumir tantas prisas ni riesgos y el partido habría cambiado». Desde luego, habría sido uno de esos goles psicológicos que habrían cambiado por completo el devenir del choque.

Aparte de esa acción, Viadero analizó en profundidad lo que había ocurrido. En un principio, reconoció que «en el inicio nos ha faltado un poco más de contundencia en la línea defensiva, hemos dado ventajas a la espalda en algunas acciones». Sin embargo, remarcó que desde que encajaron el tempranero tanto, «el equipo ha estado bien». «Ha tenido opciones para haber conseguido un gol que nos permitiera empatar», comentó acerca de la primera parte. En cuanto a la segunda, resaltó que «al equipo no se le puede pedir más en cuanto a esfuerzo, actitud y entrega». «Hemos empezado bien, pero nos ha faltado algo de pausa, estás perdiendo y el ímpetu por conseguir el empate nos ha llevado a jugar más precipitados», agregó.

De ese modo, a los sestaotarras les tocó encajar «una derrota dolorosa», en palabras de su entrenador, que asumió que estaban «fastidiados», sobre todo, por no brindarle una victoria a la afición. Viadero volvió a sentir ese ambiente una década después y dijo estar «muy ilusionado de ver al público que no para, aprieta e incluso, acaba el partido perdiendo, y siguen animando». Lamentó perder, ya que «había soñado este partido con un resultado mejor» y porque «el River tiene que ser un equipo muy fuerte en casa, agarrar todos los puntos que podamos porque los vamos a necesitar, fuera es una categoría muy complicada, hay equipos extraordinarios», arguyó.

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