La rajada con la que Ayuso carga contra el UAE. «Ha sido una dictadura»
El ciclista alicantino denuncia que su equipo anunciara «sin avisar» la rescisión de su contrato. «He sufrido una falta de respeto tras otra por parte de los directores»
La relación entre Juan Ayuso y el UAE ha saltado por los aires. Ambas partes tenían pactada la rescisión del vínculo que les unía hasta 2028 por las discrepancias sobre el rol del ciclista alicantino. Una salida ya de por sí controvertida a nivel interno, pero que se esperaba transmitir de forma cordial. Nada de eso ha ocurrido, lo que ha provocado la rajada del ciclista de Jávea.
«No entiendo por qué el UAE hizo el comunicado sin avisar. Quieren dañar mi imagen», ha declarado a los medios de comunicación desplazados en la salida de la décima etapa de La Vuelta. Ayuso sigue en carrera, obviamente con el maillot del conjunto emiratí, contra el que carga sin miramientos. «He sufrido una falta de respeto tras otra por parte de la dirección del equipo. Ha sido una dictadura», ha dicho sin reparos.
La tarde en el hotel del equipo en Navarrete fue larga. «Sobre las siete salió el comunicado. A mí se me avisa a las seis y media, cuando varios periodistas ya sabían que se iba a sacar desde la hora de comer». El acuerdo estaba previsto que se hiciera público cuando acabara La Vuelta por «respeto a todos». «Que fuera repentino y sin previo aviso hay que preguntárselo a ellos», indica el corredor de 22 años, algo que el equipo niega. «Tengo claro que lo hacen para intentar dañar mi imagen», insiste.
💥💣 La tremenda rajada de Juan Ayuso recogida por el micrófono de @qiglesias #LaVueltaEnCOPE pic.twitter.com/Nzh8tjeiEk
— COPEdaleando (@Copedaleando) September 2, 2025
Esa media hora es tensa. Ayuso trata de que la nota no se haga pública y se mantenga el plan, anunciarlo una vez acabe la ronda. «Tienes que estar contento con este comunicado, el primero que teníamos preparado era mucho peor», cuenta Ayuso que le dijeron. En el mensaje oficial, el director suizo Mauro Gianetti hacía referencia a la «armonía del grupo y la construcción de un equipo ganador» para justificar la ruptura, una decisión «coherente». «Hablan de valores y unión, pero con tanta falta de respeto del equipo es difícil hacer una unión», responde ahora el ciclista, mucho más contundente que en su propio comunicado, emitido dos horas más tarde que el del equipo.
Todo se precipitó tras la etapa del domingo en Valdezcaray. Ayuso, sin opciones en la general y ya como vencedor de una etapa, se dejó llevar antes del puerto en el que Almeida perdió 24 segundos con Vingegaard y declaró haber echado en falta más ayuda de sus compañeros. «Aprovecharon unas palabras desafortunadas de Almeida, con el que yo he hablado. Me ha pedido disculpas porque está de acuerdo con lo que pasó. Quiero ayudar, pero no estaba bien y lo ha entendido», revela el español, que insiste que su cruzada es solo contra los directores.
«La relación con los compañeros, también con Almeida por mucho que se hable, es buena y se merece todo el trabajo que le pueda dar. Se merece que aporte. Y lo voy a intentar», se compromete. «Con los buenos momentos que he tenido con los compañeros me gustaría acabar de la mejor manera La Vuelta», reitera, pese a que su alocución complica su coexistencia con Gianetti y Josean Fernández Matxín en las dos semanas que restan de carrera. Algo que, además, considera que ha hecho «difícil» su preparación para La Vuelta.
«Me han dado todo y he estado cobrando de ellos. Me hubiera gustado terminar bien. Intentamos salir bien», reitera, «pero a veces parece que no se puede cuando es más bien una dictadura y algo de poder sobre ti». El director vizcaíno, a su vez, declaraba en los micrófonos de Eurosport que la «decisión fue conjunta», que «el clima en el equipo es bueno» y que «hay que hacer el comunicado oficial en algún momento». «Mejor que estar no diciéndo nada después de tantas preguntas, lo mejor era decirlo». Almeida, por su parte, declaró que lo mejor es que «haga lo que cree que le convenga» y que «como compañero cercano, no diría amigo, nos tenemos el uno al otro».
Ayuso ahora se siente liberado. Sin ataduras. «Me he quitado un peso de encima. Estoy contento de que se sepa. El año que viene va a ser un año muy bonito, estoy muy ilusionado. Tengo ambición». Piensa en 2026, en el que pujan por su fichaje Lidl-Trek, Movistar, Ineos y Astana, pero el 2025 aún no ha terminado.