Sydney Mclaughlin bate el récord de los 400 metros vallas

Esta semana la estadounidense Sydney McLaughlin ha hecho historia al lograr el récord del mundo de 400 metros vallas y convertirse en la primera mujer en bajar de los 52 segundos en esta prueba. En baloncesto, otra joven promesa del deporte, la uruguaya Camila Krischenbaum está un paso más cerca de cumplir su sueño de jugar en la WNBA. Esta temporada la baloncestista debutará en la NCAA, la antesala de la mayor liga del mundo. EL CORREO repasa estas y otras noticias de deporte femenino de la semana.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, augura que «el fútbol femenino es el deporte que va ha experimentar el mayor crecimiento en los próximos diez años». Así lo aseguró en el segundo foro 'EFE Sport Business Days', en el que explicó que basa esa previsión en los datos de audiencia del último Mundial, que ha superado a eventos masivos como la Super Bowl. El Mundial de 2019 fue «un éxito increíble», con 1.200 millones de espectadores. Por su parte, Infantino recordó que el organismo que preside mantiene su compromiso en el desarrollo del fútbol femenino y una inversión de 1.000 millones de dólares para que niñas de todo el mundo puedan acceder a este deporte.

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La estadounidense Sydney McLaughlin ha batido esta semana el récord mundial de los 400 metros vallas en los Trials USA en Eugene (Oregon). Completó la prueba en 51.90 segundos, convirtiéndose en la primera mujer que baja de los 52 segundos. Hasta el momento, la marca mundial estaba en poder de la campeona olímpica y mundial Dalilha Muhammad, que corrió en 52.16 segundos en los Mundiales de Doha 2019. McLaughlin ya ha demostrado con anterioridad que no se adapta a los moldes: en 2016 se convirtió en la atleta más joven en participar en los Trials con 16 años. Y ahora, con 21, ya tiene un récord mundial.

Camila Krischenbaum, considerada uno de las mejores baloncestistas de su edad en Sudamérica, debutará esta próxima temporada en la NCAA, la antesala de la liga más importante del mundo: la WNBA. Tras pasar por los equipos españoles Rivas y Unió Esportiva Mataró, la pandemia devolvió a la jugadora a su país y ahora se prepara para dar el siguiente paso en su carrera. «Mi sueño es llegar a la WNBA y hay que trabajar duro para llegar ahí. Ahora ya estoy un paso más cerca», aseguró Krischenbaum.