Cabría pensar que este año, con las cenas de Nochebuena reducidas a su mínima expresión y con tanta gente confinada y sola en sus casas, ... sin más compañía que la tele, las cadenas habrían echado la casa por la ventana, con una Nochebuena entrañable, solidaria, amena y divertida, llevando emoción, alegría y compañía a tantos hogares que merecen una lucecita de felicidad. Decía que cabría esperar, pero estamos escribiendo de la televisión en España, es decir, un erial en donde la imaginación y las ganas de innovar brillan por su ausencia. Al final se cumplieron los peores pronósticos y la programación televisiva de la Nochebuena fue penosa.
La 1 repitió el esquema de años anteriores, 'Telepasión', con los rostros de la cadena haciendo el ganso, y después dos especiales musicales, el primero con Ana Torroja y el segundo con Aitana. Como estos especiales de Nochebuena y Fin de Año son los únicos musicales de Televisión Española, al final el que no se consuela es porque no quiere. La 2 llenó horas a base de refritos de humor, primero con 'Humorpedia' y después con 'Cómo nos reímos'. Hay humoristas cuyos chistes se han emitido ya tantas veces que maldita la gracia que nos hacen. Antena 3 recuperó imágenes de momentos divertidos de años atrás con 'Lo mejor de cada casa' y después un refrito de diferentes momentos de 'Tu cara me suena'. Cuatro apostó por el cine de animación, Telecinco por una gala con los de siempre, incluido Bertín, y La Sexta se olvidó de sus directos para poner uno tras otro, viejos 'Equipo de investigación'. Para echarse a llorar. Y lo curioso es que el jueves, la víspera, con la despedida (de temporada) de 'El intermedio' y el adiós (definitivo) a 'Late Motiv', la noche estuvo muy bien. Menos da una piedra.
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