La ABAO afrontará un sobrecoste de 125.000 euros

En esta ocasión, sin embargo, no se pondrá a la venta ninguna entrada en taquilla para las funciones (días 22, 24, 26, 28 y 31 de este mes). Solo se hará frente a la demanda de los cerca de 3.200 socios de la ABAO y los compromisos con los patrocinadores. «Además, no olvidemos el perjuicio económico. Como mínimo dejaremos de recaudar unos 60.000 euros», apuntaba ayer Juan Carlos Matellanes, presidente de la ABAO, en la sede de la Fundación BBVA, que patrocina el estreno de la ópera. Se calcula asimismo que la decisión de no suspender las funciones de 'La clemenza di Tito' supondrá un sobrecoste económico aproximado de 125.000 euros, «algo muy importante, somos una entidad privada y nadie nos cubre el déficit».

La Euskadiko Orkestra y el Coro de Ópera de Bilbao han renunciado a cobrar por la quinta representación añadida, «y todos los demás implicados se han avenido a reducir sus cachés para tratar de absorber el sobrecoste y eso es muy de agradecer». El compromiso del equipo artístico es absoluto y hasta ahora todo va rodado, pese a las limitaciones y protocolos que impone el covid. No hay bajas por coronavirus que trastoquen la organización y se cuenta con dos elencos para garantizar eventuales reemplazos.

El responsable artístico de la ABAO, Cesidio Niño, recalcaba ayer el hito que implica estas funciones de 'La clemenza di Tito' en Bilbao: «No solo es un título que se estrena en nuestra temporada, sino que hemos fichado un equipo de primera. Hemos traído una producción que gustará muchísimo. Es magnífica, lo mismo ahora que dentro de 15 años». De estilo neoclásico, con el mármol y bronce como elementos básicos, el vestuario es sofisticado, con una estética que recuerda a veces los años 30 y 40 en Italia, «cuando en mi país se vivía una época especialmente convulsa», señalaba el director de escena Fabio Ceresa, después de que se proyectara un 'trailer' del montaje. La figura del emperador Tito Flavio Sabino Vespasiano (79-81), al que sus contemporáneos llamaban 'Amor y delicia del género humano', aparece en esta ópera como un dechado de virtudes. «Es casi como un dios, por encima de las leyes humanas», recalcaba Ceresa.

La trama, llena de intrigas y traiciones, puede parecer muy ajena a la actualidad, pero el director artístico de la ABAO está seguro de que «los políticos, ciertas empresas y grupos financieros deberían verla». Para constatar que «todo rueda y no hay nada nuevo».