Los guionistas de la tele no temen al cine

Tras la historia está parte del equipo habitual de la productora de títulos de éxito como 'Velvet' o 'Las chicas del cable' (Gema R. Neira, Salvador S. Molina y David Orea), que han probado suerte esta vez con el terror. «Siempre trabajamos a varias manos. No entendemos por qué hay que cambiar la dinámica para el cine. Es otro medio, otra estructura, pero la forma de trabajo no varía», aclara Campos. «La gente tiene la costumbre de que las películas sean algo más autoral y nosotros reivindicamos que tanto el cine como la televisión no tienen autor. Por eso nunca firmamos 'creada por', sino 'una idea original de'. La creación es comunitaria, de los guionistas, de los de fotografía, de los de iluminación...», indica el escritor gallego.

'Malasaña 32' se centra en Manolo y Candela, una pareja que se instala en el madrileño barrio de Malasaña junto a sus tres hijos y el abuelo, tras dejar el pueblo en busca de la prosperidad de la ciudad, en los años setenta. Sin embargo en el piso en el que comienzan a vivir suceden fenómenos extraños. «No hemos venido a revolucionar el terror, sino a revitalizarlo y a que llegue a más gente. Y creo que lo hemos conseguido», admite Campos, que considera que en una cinta de terror pueden abordarse asuntos muy diversos y no quedarse en una sucesión de simples sustos. «Hemos hablado de la emigración del pueblo a la urbe, de la soledad de la ciudad y de las dificultades de la gente diferente». El referente del 'padre' de Bambú era Blumhouse Productions, estudio que está detrás de títulos como 'Whiplash', 'Paranormal Activity' o 'Insidious'. «Nos fijamos en ellos sobre todo para hacer un filme presupuestariamente controlado».

Esta inmersión no quedará como algo anecdótico. De hecho ya preparan una nueva producción de terror, '13 exorcismos', basada en hechos reales como 'Malasaña 32'. Antes estrenarán una película dramática, 'El verano que vivimos', y el próximo proyecto de Isaki Lacuesta. Para sumergirse en esta aventura cinematográfica han puesto en marcha una nueva empresa, Mr. Fields & Friends, con la que pretenden generar una marca fácilmente reconocible.

La intención no es, ni mucho menos, abandonar el universo de las series. De hecho ya tienen otro encargo de Netflix, 'Jaguar', protagonizado por Blanca Suárez, que interpretará a una joven superviviente del campo de refugiados de Mauthausen. Y aunque los últimos títulos no han contado con la audiencia deseada, no tiran la toalla en las cadenas generalistas. «Los Caballero han conseguido que sus series -'El Pueblo', 'La que se avecina'- se sigan viendo en abierto, por lo que ahí hay hueco. Quizá le hemos intentado dar a la gente obras que no eran para esos canales, hemos arriesgado cada vez más. A lo mejor el público necesita productos más convencionales. Eso no es malo. Los británicos lo llevan haciendo años y el resultado ha sido muy bueno», argumenta Campos, que discrepa con aquellos que reniegan de las series y dicen que hacen 'películas de seis horas'.

«La gente del cine durante años se ha considerado por encima de la media de la población, culturalmente hablando se creen superiores. Por eso desprecian a gran parte del público que ve la tele e idean proyectos para públicos con otro 'nivel intelectual'», lamenta Campos, que advierte de que estos riesgos pueden provocar que la audiencia de la tele les dé la espalda. Para tratar de frenar la huida, Campos y su equipo continúan dando forma a propuestas que reivindican como «buenas y comerciales».