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Yvonne Iturgaitz

Formidable espectáculo

Viernes, 29 de noviembre 2024, 19:22

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Pues sí, esa habilidad de Paul Pfeiffer para alterar imágenes, sonidos y transmisiones televisivas o para destacar personas y personajes nos empuja inocentemente a un ... superficial mironismo colectivo, a un 'peep show' en el que somos invitados congénitos, atraídos a la sociedad del espectáculo como abejas a la miel, hipnóticos ante la transformación de lo real por el medio, ya sean imágenes o sonidos. Son a veces secuencias manipuladas y reiterativas –como las de Tom Cruise o Michael Jackson–, que nos provocan una curiosidad contemplativa. También, extirpaciones manoseadas de la imagen de un púgil en pleno combate de boxeo, cuya inexistente silueta ondulante fascina nuestra imaginación; o incluso recreaciones tan reconocibles como el set y la bañera de 'Psicosis' o la final televisada de aquel Mundial de 1966 en Wembley –con la ausencia de Perkins o Leigh en la primera y el 'fake' sonoro del espectáculo futbolero en la segunda–, que terminan por hacernos sospechar que en el recorrido por esta muestra lo real se ha convertido en una simulación virtual, en una nueva realidad que altera nuestra relación con la misma. Exacto, porque las obras de Pfeiffer y su insistente manipulación digital y tecnológica del espectáculo son de por sí una expresión artística, atractiva en su visualidad o incluso en su ruido, pero también una apelación conceptual y crítica sobre muchas cosas: el artificio, el carácter engañoso de la imagen, el vacío subyacente de lo anterior, la seducción perversa de los medios, la iconomanía, la idolomanía, el consumismo desbocado, etc… Sí, conceptos y debates ya muy masticados y digeridos, planteados como soporte académico en el fondo discursivo de esta muestra, cuyo epígrafe también es ampuloso en su literalidad: 'Prólogo de la historia del nacimiento de la libertad'. Quizás por eso, por todo, lo realmente original de Pfeiffer en esta muestra sea el convertir con éxito el medio, el mensaje y hasta la propia crítica de la sociedad del espectáculo en otro gran y formidable espectáculo.

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