Martín Berasategui cierra La Bodega de Ola
Martín Berasategui cierra el gastrobar La Bodega de Ola del Casco ViejoEl cocinero guipuzcoano trasladará a pie de calle el restaurante con estrella Michelin que tenía ahora en la primera planta
Hola y adiós. Martín Berasategui está sufriendo un pequeño traspié a su paso por Bilbao. Seis años después de inaugurar el hotel Tayko y el restaurante de alta cocina Ola Martin Berasategui, el cocinero guipuzcoano ha bajado la persiana a La Bodega de Ola, el gastrobar que creó a pie de calle, en la Ribera, en una zona transitada por numerosos turistas. En sus orígenes el bistró nació con ganas de erigirse en un referente de cocina informal y animar el ambiente del Casco Viejo, transformado en uno de los principales reclamos culinarios de la ciudad. Sin embargo, nunca terminó de cuajar entre la clientela juvenil, a la que puso claramente en su punto de mira.
La Bodega de Ola varió su puesta en escena y redefinió su propuesta con una variada oferta de desayunos y brunchs, pensada especialmente para periodos vacacionales. «Pasó de presentarse como un gastrobar a ser un restaurante con todas las de la ley», explican fuentes de la compañía. Optó por un menú degustación que complementó con una pequeña carta concebida para compartir, donde tradición y actualidad se combinaban sobre la base de productos de temporada. Una cuidada carta con platos de alta cocina aderezada con una destacada selección de vinos nacionales e internacionales. También destinó una zona de bar para picoteo y degustación de raciones. Sin embargo, la nueva oferta siguió sin imponerse.
Ahora, el chef vasco reestructurará el negocio. El restaurante con estrella Michelin abandonará la primera planta y se situará en la baja. Fuentes de la compañía han evitado pronunciarse sobre el uso que se dará al piso que queda libre. Berasategui irrumpió en Bilbao y acompañó sus fogones tradicionales del Tayko Hotels, emplazado en un edificio que mudó de almacenes industriales a alojamiento de lujo vanguardista. El edificio que alberga Tayko Hotels ha cumplido un siglo de historia y tradición bilbaína. Una arquitectura singular en la que hormigón, metal y ladrillo se fundían con sofisticación. El emblemático edificio de la calle Ribera, el cuarto en España construido íntegramente en hormigón en 1924, es un testimonio vivo del Bilbao industrial del siglo XX.
Los almacenes del astronauta
Con el tiempo aquellas instalaciones acogieron los conocidos Almacenes Zubicaray, con su emblemático astronauta. El nombre Tayko, inspirado en el término oriental 'taykonaut' (astronauta), supone un claro guiño por preservar tan singular legado y simboliza «nuestra ambición de llevar a nuestros huéspedes a un viaje inolvidable a través de la historia y la innovación». El hotel y el restaurante se mantienen, pero el gastrobar ha echado el freno en un momento de enorme bullición hostelera que replantea las dudas sobre un sector que vive un ritmo frenético con continuas aperturas.
No es el primer revés que sufre este año Berasategui. El pasado junio abandonó el restaurante madrileño El Club Allard, después de año y medio de trabajo y de haber conseguido la primera estrella Michelin. Al cocinero vasco, que atesora 11 estrellas de la guía francesa, le habían bastado solo ocho meses para conseguir que el local luciera la máxima distinción. «Me he tenido que ir, no porque el proyecto haya fracasado ni a mí se me resista Madrid, me he ido porque en este tiempo no me han pagado ni un euro», apuntó. El traspié de Bilbao supone un segundo desliz.
