Eñaut, el diseñador vasco que repite éxito en la pasarela de Barcelona

La pandemia cambió, entre otros muchos aspectos, los desfiles de moda. El sector tuvo que reinventarse a golpe de creatividad para hacer llegar sus propuestas a un público con ganas de más. Ante la imposibilidad de presentar las propuestas de los diseñadores en unas pasarelas 'in situ', la industria tuvo que trazar un plan B. Exploró nuevas fórmulas y, finalmente, apostó por trasladar los desfiles al entorno digital. No quedaba otra. Y funcionó, se rompieron las barreras físicas para hacer sentir la moda desde el otro lado de la pantalla. Primero fue la Semana de la Moda de París, hasta que este nuevo formato llegó a nuestro país con la pasarela 080 Barcelona Fashion, que impulsa el Consorcio de Comercio, Artesanía y Moda (CCAM) del Departamento de Empresa y Conocimiento. Un certamen que repite formato en su 27ª edición, que se celebra del 26 al 29 de abril. Nunca había sido tan sencillo sentarte en el 'front row' para disfrutar de las propuestas de los diseñadores desde el sofá de casa. En esa ocasión, la pasarela se celebra en la Casa Milà, ubicada en el corazón de la ciudad condal, con una primera jornada que ha contado con acento vasco gracias al diseñador Eñaut Barruetabeña y su firma homónima.

El creativo se ha convertido en uno de los imprescindibles en el encuentro desde que debutara en esta pasarela barcelonesa en 2019. Tras mostrar durante tres años sus propuestas en la cita, una de forma digital, presenta ahora su nueva colección 'Logging 4%', inspirada en la explotación de los recursos naturales y la deforestación, las causas de la emergencia climática y la alarma social. «Le he puesto este nombre porque en inglés define el proceso industrial de árboles y que está provocando la deforestación y la destrucción de los bosques», explica el vasco, que ganó el último premio 080 Barcelona Fashion a Mejor Colección de Diseño Emergente.

Su nueva propuesta se construye en base a tres gamas cromáticas: el verde, el negro y el arena. «Es una clara analogía del proceso que da título a la colección», aclara. De hecho, cada color tiene su significado: el verde representa el bosque o la abundancia de vegetación, el negro la destrucción, los restos de un paisaje combusto, y, por último, el arena es una clara refrencia a la desertificación y a la ausencia total de naturaleza, lo que queda de una tierra sin vida. Además, apuesta por la combinación de looks más 'comfy', a los que aplica elementos y códigos que toma prestados de la sastrería.

Las prendas están elaboradas con tejidos más invernales y extraídos de procesos de reciclado como la lana regenerada o el cuero vegano. En esta nueva colección, que saldrá a la venta la próxima temporada otoño-invierno, destacan los trajes de doble botonadura en paño y unos abrigos amplios, diseños es los que juegan los binomios de los códigos estilísticos de la propuesta: «el fit 'oversize' y los cuadros». Unas prendas que el diseñador vasco combina con pantalones 'jogging' con pinza y con sudaderas en tejidos técnicos.

Para dar forma a las joyas que lucen los modelos, la firma de este vasco ha trabajado una vez más con la firma mexicana 'Tó Garal'. De esta manera, crearon piezas en plata como anillos con formas de corteza de árbol, texturas de hojas o capas arenosas.