Vecinos del Casco Viejo se organizan contra las viviendas turísticas
Lanzan una guía para que los propietarios las prohíban en sus comunidades y llevarán al pleno municipal una iniciativa para limitarlas
Si hay un sitio donde están reguladas las viviendas turísticas, es en las Siete Calles. A la normativa autonómica, que obliga a los alojamientos a ... darse de alta en un registro oficial y mostrar una placa identificativa en el portal, se le suma la municipal, que solo permite instalarse a los pisos en primeras plantas, mientras que las habitaciones pueden estar en cualquiera de las alturas del edificio. En el caso de Casco Viejo los obstáculos son todavía mayores: solo permiten un uso turístico por bloque (mientras en el resto de zonas no están limitados mientras cumplan las ordenanzas).
Sin embargo, este refuerzo del reglamento no ha conseguido frenar la proliferación de habitaciones y pisos turísticos en la zona. De hecho, en el Casco Viejo se ubica una de cada cuatro viviendas de esta tipología que hay en Bilbao, lo que ha provocado el enfado de unas asociaciones de vecinos que han empezado a organizarse.
«Cuanto más se dirija al turismo, con menos nos quedamos los del barrio ya que encarecen los precios de todo», protesta Iria Peleteiro, portavoz de la asociación vecinal SOS Alde Zaharra. «Además, las molestias que provocan son constantes. Cada día entra gente diferente con llaves a los edificios, lo que genera una situación de inseguridad», explica.
Esta situación ha llevado a su organización, junto a Bihotzean (la asociación de vecinos del Casco Viejo) a preparar una iniciativa popular, que presentarán en un próximo pleno, destinada a controlar la proliferación de esta fórmula. Su propuesta principal consiste en establecer una moratoria a la concesión de licencias a pisos turísticos, tal y como ocurrió en San Sebastián.
También solicitarán que se impulse un estudio segregado por barrios paran analizar las consecuencia del aumento desaforado de estas viviendas. Y, una vez realizado, «activar medios técnicos para asegurar que se va a responder a las demandas vecinales».
Reunión de vecinos
A la espera de que «las instituciones tomen medidas», desde SOS Alde Zaharra están difundiendo un manual para animar a las comunidades de vecinos a que prohíban los pisos turísticos en sus edificios. Así lo permite la legislación, siempre y cuando lo acepten tres quintas partes de los propietarios y registren el acuerdo, lo que cuesta unos 3.000 euros.
Ernai reivindica las pintadas sobre las placas de Uribarri
Ernai, las juventudes de la izquierda abertzale, reivindicaron ayer a través de las redes sociales las pintadas realizadas el pasado lunes en Uribarri sobre una decena de placas identificativas de viviendas turísticas. En un mensaje en la red social X arremetieron contra «la especulación con los derechos fundamentales» que, consideran, se realiza con estos alojamientos.
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