El Tribunal de Cuentas señala a un cargo del Txorierri por subirse el sueldo de forma ilegal
El gerente de Egaz aprobó un aumento a la plantilla del 5,7% y a él mismo del 6,8%, cuando el límite era del 3,5%, además de una paga extra «nunca» vista
El Tribunal Vasco de Cuentas Públicas ha detectado irregularidades en la gestión de Egaz Txorierri, un organismo que pertenece a la Mancomunidad de esta comarca ... vizcaína, que está dirigida por el PNV y que cuenta con un 100% de capital institucional. El órgano fiscalizador advierte de que el gerente de la entidad se subió el sueldo de manera unilateral, «sin que existiera ninguna resolución que autorizara esta medida», y se asignó, además, el cobro de una paga extraordinaria al margen de cualquier disposición legal.
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Los hechos que ahora salen a la luz se remontan a 2022, tal y como figura en la documentación a la que ha tenido acceso EL CORREO. El Tribunal de Cuentas apunta como responsable directo de estas anomalías a Alex Loustaunau, que dirige desde 2001 la sociedad pública encargada de gestionar programas de empleo del Txorierri. Asegura el órgano fiscalizador que Loustaunau dio el visto bueno a un incremento en las nóminas del 5,7% con respecto al año anterior para los 16 empleados de la plantilla. Al mismo tiempo, se subió el salario un 6,8%. En todos los casos, «se superó el límite establecido» aquel año para los empleados del sector público vasco y español, que fue en ambos casos del 3,5%.
Adicionalmente, el gerente tramitó «un complemento retributivo del 4,5% para el personal laboral fijo y del 5,8%» para él mismo. Para ello autorizó el abono de una paga extraordinaria que nunca se había concedido en Egaz Txorierri. Este tipo de gratificaciones están fuera de lugar en el sector público. No alcanzó el rango de consolidable pero constituyó el 75% de una mensualidad. Loustaunau tiene un sueldo anual de 86.895 euros brutos.
El 27 de noviembre de 2023, el gerente, que ha declinado hacer declaraciones, devolvió la paga que él mismo había aprobado concederse. Lo hizo 11 meses después de que el Tribunal de Cuentas anunciara que incluía en su plan de trabajo la fiscalización de la Mancomunidad del Txorierri. La auditoría estaba en marcha.
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«No informa»
El informe constata que Loustaunau tenía (y aún dispone) de plenos poderes «para ejercer funciones de nombramiento de empleados y fijación de las retribuciones del personal». Sus decisiones no pasan ni por la Consejo Plenario ni por la Comisión de Gobierno, órganos que controla el PNV con mayoría absoluta. La Mancomunidad del Txorierri la componen los ayuntamientos de Derio, Larrabetzu, Lezama, Loiu, Sondika y Zamudio. Todos ellos, salvo el último, están gestionados por los jeltzales. Así lo recoge el Tribunal de Cuentas: «El gerente no informa al Consejo sobre la fijación de las retribuciones del personal».
En sus alegaciones al Tribunal de Cuentas, Loustaunau afirma que «sí se puede admitir que no se ha detallado al Consejo la situación de cada persona trabajadora en el momento de cada contratación, aunque nunca se ha ocultado a solicitud del Consejo o alguna de las personas integrantes del mismo». Por último, como un asunto menor, el órgano fiscalizador señala que la auditoría de la Mancomunidad no recoge que Loustaunau cuenta con un contrato de alta dirección desde 2021.
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«No parece legal, pero no hay un perjuicio económico»
La Mancomunidad del Txorierri admite que las decisiones tomadas por el gerente de Egaz a la hora de subir el salario de la plantilla y el suyo propio, así como la paga extra inédita que otorgó, «no parecen legales». Pero explican que la medida no ha supuesto «un perjuicio económico» para las arcas públicas.
La vicepresidenta de la entidad, Ikerne Zuluaga (teniente de alcalde por el PNV en Lezama), se remite a las alegaciones presentadas ante el Tribunal de Cuentas. En las mismas, se explica que el personal de Egaz, pese a ser una entidad 100% pública, se regía desde su fundación en 2001 por el convenio de Oficinas y Despachos. Y que el incremento de sueldo perseguía equilibrar la pérdida de poder adquisitivo que los 16 empleados habían sufrido en los últimos años en comparación con el sector público.
Respecto a la paga extraordinaria que el gerente decidió devolver un año después, la Mancomunidad asegura que aquel 2022 estuvo «cargado de trabajo». La plantilla realizó «una excelente» labor, dedicando «muchas veces» más tiempo del fijado en su jornada. También destacan que consiguieron financiación adicional gracias a su labor. Por ese motivo, se decidió «de manera excepcional y por primera vez en la historia» dar la gratificación. La plantilla ha sido asimilada en este 2025 al sector público, lo que ha puesto que los costes salariales hayan pasado de 764.000 a 863.000 euros.
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