El temor a las agresiones sexuales en fiestas mantiene en vilo a los alcaldes
Los protocolos se centran en cómo actuar tras un ataque y en la concienciación. Todos aseguran que habrá más policía
La «preocupación» por la temporada de fiestas está instalada en las instituciones y policías vizcaínas. Los ayuntamientos miran con temor al cóctel de «violencia, alcohol ... y drogas», que está detrás de las peleas multitudinarias como las recientes de Etxebarri e Ibarrekolanda, y dispara el riesgo de que aumenten los delitos sexuales. En los cuatro primeros meses del año, según datos facilitados por Emakunde, este tipo de ilícitos crecieron en Bizkaia un 34,4% con respecto al mismo período del ejercicio anterior. Y, en este arranque de la temporada de festejos, después de dos años de apagón, ya se han registrado sendas denuncias de agresión en Ortuella y Beasain. La estrategia de las administraciones es más a largo plazo, centrada en la concienciación, la educación y la promoción de un cambio de valores, coinciden responsables institucionales, magistrados y policías. Y también «reactiva», con protocolos y formación para que los agentes implicados en los festejos -trabajadores municipales, comisiones, cuadrillas, miembros de txosnas, hosteleros...- sepan cómo actuar en caso de que se produzca algún abuso.
El Instituto Vasco de la Mujer, en colaboración con el Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Eudel y las diputaciones, ha preparado una guía de ayuda a las entidades locales. Sin embargo, reconocen algunos de la veintena de alcaldes y concejales vizcaínos consultados por este periódico, a corto plazo apenas disponen de mecanismos preventivos.
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Varios de los regidores no quieren aparecer en esta información porque se confiesan «desbordados»; no saben cómo poner coto a las agresiones sexuales, ya que «es imposible poner un policía en cada portal». Las soluciones rápidas, lamentan, no existen, precisamente porque «la violencia contra las mujeres es estructural y multidimensional», subraya Izaskun Landaida, directora de Emakunde. Hasta que se cosechen los resultados de los planes institucionales, son necesarias otras herramientas, como intensificar la vigilancia.
La Ertzaintza y las guardias urbanas «reforzarán», como otros veranos, los dispositivos. Son operativos destinados a los recintos festivos, pero también, explican desde el Ayuntamiento de Basauri, a los puntos de tránsito, como paradas de transporte público, zonas peatonales, itinerarios hacia los barrios...
Este fin de semana habrá despliegues especiales en Gallarta y Etxebarri, donde aseguran que disponen de «casi el doble» de efectivos que en los 'sanantonios' de 2019. Entre otras funciones, frenarán el botellón y recordarán a comercio, hostelería y txosnas que está prohibido vender alcohol a menores. En ese sentido, Blanca Estrella Ruiz, presidenta de la asociación Clara Campoamor, insiste en la importancia de que los agentes controlen el binomio alcohol y menores. «No entiendo cómo hay niñas y niños de 13 años bebiendo a las cuatro de la mañana», cuestiona. «Las chiquillas a las que emborrachan» son carne de cañón para los agresores, que «las vigilan y las siguen hasta que una se queda sola».
Víctimas menores de edad
Según los datos del Ministerio del Interior, la mitad de las víctimas de delitos sexuales son menores de edad. «Hay que poner límites a los chavales», subraya Nerea Melgosa, asesora en materia de igualdad del Gobierno vasco. Considera que hay que tener «mil ojos en la calle» y los ayuntamientos deben controlar «los puntos negros» e intensificar «la vigilancia». Pero, señala Sergio Gómez, secretario general del sindicato policial Erne, para eso es necesario que «seamos más». «Estamos menos de 7.400 ertzainas y deberíamos ser 8.000», recuerda.
A lo largo de la geografía española, algunas localidades y mancomunidades han contratado servicios de seguridad privada o serenos, aunque no tanto para evitar las agresiones sexistas en fiestas como para frenar los robos en zonas más apartadas. Esa herramienta, apunta Melgosa, debería decidirse «en cada pueblo», si contratan «unos serenos para reforzar o ponen a cuatro padres o madres en los puntos negros». Aunque los ayuntamientos argumentan que los procesos de contratación no pueden realizarse «de un día para otro» y que esas personas necesitan «formación». «No se puede poner a cualquiera», puntualizan varios concejales.
Leticia Badiola, titular del juzgado de Violencia contra la Mujer número 1 de Bilbao, considera que «hay que ponderar los derechos que se restringen y los que se pretenden proteger» antes de adoptar ese tipo de medidas. En su opinión, lo que consigue «la igualdad y el respeto» es «una educación en valores y una cultura equitativa». Y apela a tener cierta «responsabilidad» individual, a saber «por qué calles no ir».
La magistrada no ve con malos ojos, si las propias mujeres «detectan que hay una necesidad y se encuentran más seguras», la puesta en marcha de servicios de acompañamiento. Santurtzi, Leioa y Plentzia, donde el pasado año vivieron la peor cara de esta lacra -hubo una violación grupal-, volverán a contratar este servicio. En Gallarta y Galdakao pondrán autobuses, aunque dirigidos a toda la ciudadanía. «En los municipios más pequeños se organizarán las cuadrillas para llevar a la gente a casa», explica Ángela Eguía, alcaldesa de Gordexola y miembro de la Comisión de Igualdad de Eudel. Es lo que harán también en Etxebarri, donde ya están llenos todos los turnos de acompañamiento de este fin de semana.
Para María Eugenia Rufino, responsable de Igualdad de la Federación Española de Municipios y Provincias y alcaldesa de Salobreña (Granada), estas fórmulas, extendidas a nivel nacional, «funcionan muy bien» a pesar de que «victimizan» a las mujeres. Y es que, lamenta la regidora, «hay más concienciación, pero las cifras no mejoran y la realidad es la que es».
Las frases
Femp
María Eugenia Rufino
«Quiero pensar que sin campañas esto sería peor, pero las cifras no mejoran. Es demoledor»
Directora de Emakunde
Izaskun Landaida
«El problema no se limita a la víctima y al agresor; es un problema estructural, de valores»
Asesora de Igualdad Gob. vasco
Nerea Melgosa
«No puede parecer que cualquier cosa sale gratis. Es muy importante el rechazo público»
Comisión de Igualdad Eudel
Ángela Eguía
«Algunos ayuntamientos pequeños se plantean que las cuadrillas se organicen para acompañar a casa»
Jueza de Violencia de Género
Leticia Badiola
«Lanzar el mensaje de que si sales te van a agredir no es bueno, pero la gente debe saber por dónde va»
Asociación Clara Campoamor
Blanca Estrella Ruiz
«No vayáis solas. La calle es nuestra, pero las fiestas son el momento oportuno para los indeseables»
Secretario general ErNE
Sergio Gómez
«En lugar de una policía reactiva, tenemos que ser de proximidad. Y para eso tenemos que ser más»
Concejala de Igualdad de Erandio
Aitana López
«En las fiestas hay más gente, pero cada dos semanas tenemos una agresión. Pasa todo el año»
Mejorar la iluminación y baños con seguridad en fiestas y discotecas
Detalles como iluminar más y poner seguridad en los baños. El Ayuntamiento de Ortuella los aplicó tras la agresión de mayo en sus fiestas y los implementarán, por ejemplo, en fiestas de Gallarta y Mungia. También las discotecas toman ese tipo de medidas. Sonora instaló a finales de año una iluminación exterior disuasoria más potente. En el horario en el que va gente más joven, hay más luz en la pista, y el personal vigila que en los aseos de mujeres no entren hombres y viceversa.
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