Un problema con las puertas retrasa el estreno de los 'Mercedes' de la Policía de Bilbao

Los 35 'Mercedes' adquiridos bajo la modalidad de renting por la Policía Municipal deberían estar patrullando las calles de Bilbao desde hace cuatro meses. Sin embargo, a pesar de que los vehículos se encuentran ya en la comisaría de Miribilla, el Ayuntamiento sigue sin tener una fecha concreta para su presentación, según confirmaron a este diario fuentes del Consistorio. El último contratiempo ha surgido en las puertas traseras, las que dan acceso al espacio en el que se traslada a los detenidos. Concretamente, con el sistema electrónico que controla el bloqueo.

Fuentes oficiales del Ayuntamiento de Bilbao insisten en que los 'Mercedes' clase B Sport Tourer «no tienen ninguna avería» que impida «cerrar las dos puertas traseras en los vehículos que tienen mampara». Lo que ocurre -puntualizan- es que se trata de un sistema de fucionamiento «diferente» al que ha manejado la Policía local «hasta la actualidad». Es decir, las puertas se cierran y abren «de forma independiente al resto del vehículo», accionando un «botón» situado en el mando de las luces de emergencia. Esto implica -dicen- que los accesos se puedan quedar abiertos si al policía «se le olvida» cerrarlos. «Pero como podría ocurrirle también si se le olvida cerrar el resto de las puertas con las llaves del coche».

En todo caso, desde el Consistorio admiten que «debido a las dudas» que se han despertado en cuanto al «manejo» y al «buen funcionamiento» de los 'Mercedes', los técnicos de la Policía municipal «están estudiando la forma de conseguir que las puertas traseras funcionen tanto con el mando interior de los rotativos (sirenas) como con la propia llave del coche».

El problema, según fuentes conocedoras de lo ocurrido, se encuentra en la centralita del sistema electrónico que se instala en los coches que son adaptados para uso policial. Este mismo contratiempo ya ha surgido en otros modelos de vehículos policiales.

La adjudicación de los 'Mercedes', valorada en 1,7 millones de euros, ha causado malestar en el resto de las empresas que participaron en la licitación y ha generado recelos en algunos de los partidos de la oposición. Dos de las seis compañías que pujaron por hacerse con el contrato presentaron recursos administrativos que fueron desestimados. Entre las deficiencias denunciadas en la adjudicación se encuentra un incumplimiento del pliego de condiciones. Y, en las últimas semanas, el PP y Goazen también se han interesado por estos coches. El portavoz popular, Luis Eguiluz, asegura que este asunto «se pone cada vez más feo» y acaba de lanzar una batería de preguntas al Ayuntamiento para saber, entre otras cosas, si los coches cuentan «o no con la homologación para la función policial».