«No voy a permitir asentamientos ilegales que pongan en riesgo la seguridad»
Tras una década al frente del gobierno local, apuesta por reforzar la Policía con «más medios y una mayor coordinación»
Amaia del Campo lleva 10 años al frente del Ayuntamiento de Barakaldo. Licenciada en Derecho, en 2015 se convirtió en la primera mujer al mando ... tras lograr que el PNV desbancara al PSE después de más de tres décadas de gestión socialista.
- Acaba de cumplir una década como alcaldesa de Barakaldo.
- Interpreto el respaldo de los vecinos en clave de responsabilidad. Cuando llegué fue por menos de cien votos, empatados a concejales con el segundo partido (PSE). Luego obtuvimos 11 escaños y ellos 8, y en las últimas elecciones nos hemos mantenido, y ellos han bajado a siete. Hemos optado por hacer un Barakaldo para vivir, trabajar y disfrutar. Ha habido proyectos muy ilusionantes como el parque de Zamalanda junto a la Ría, un sueño compartido por muchos, con una playa urbana de 90.000 metros cuadrados. ¡Quién iba a decir que íbamos a poder tocar la Ría!
- Está en el ecuador de la legislatura. ¿Cómo han sido los dos últimos años?
- Intensos. Hemos pasado de una ciudad de cemento y hormigón a corazones verdes en los barrios. Además de Zamalanda también está Serralta, en un espacio de ruinas industriales. Pero lo más apasionante está por venir, es hora de acelerar para que todo el plan de mandato sea una realidad.
- Para ello pedirán un préstamo de 21,6 millones, con la vista puesta en la nueva comisaría, la casa de la mujer... ¿Por qué ahora?
- Es cuando había que hacerlo, después de estudios previos, anteproyectos... Las cuentas del Ayuntamiento están saneadas, podemos garantizar el gasto en servicios, afrontar el préstamo y seguir teniendo una mínima capacidad de ahorro para imprevistos.
- La oposición lo ve como un movimiento «oportunista».
- Respeto mucho la opinión de todos los partidos políticos, pero son compromisos ya adquiridos y nosotros cumplimos la palabra. Es una medida obligada.
- También le han criticado por la falta de Presupuestos. Estamos a mitad de año, y esto ha sido una constante los últimos ejercicios.
- Hemos tenido que devolver 5 millones a Udalkutxa, un gran reajuste, con el coste de los servicios en aumento. Estamos también con una modificación de la relación de puestos de trabajo que se tiene que reflejar. En Portugalete, con mayoría absoluta, tampoco los han aprobado. No es lo deseable, pero lo importante es que tenemos herramientas para seguir trabajando.
- Hace unos días un hombre mató a otro en Lutxana, cerca de una zona de campamentos ilegales. ¿Actuarán en ese solar y en otros en una situación similar?
- Es un fenómeno que existe aquí y en todas partes. Hay que trabajar, no voy a permitir que este tipo de asentamientos acaben poniendo en riesgo la seguridad o la convivencia de nuestros barrios. Vamos a actuar con firmeza, impulsando medidas para apoyar a las personas que lo necesitan, y rehabilitando la zona. Ocurrirá allí, en Sefanitro, donde se pondrán en valor esos espacios para la ciudadanía, y en el parque Urkullu, que se regenerará.
- Según un estudio municipal, la inseguridad es la principal preocupación de los vecinos.
- En cuanto a los datos de criminalidad, han bajado los delitos más preocupantes, pero luego está la sensación de seguridad. Hay que trabajar para sentirnos seguros en nuestras calles. Primero, actuando con firmeza, mejorando la coordinación con la Ertzaintza y contando con más medios.
Fricciones en el gobierno
- La fábrica Oxinorte ha sido multada pero sigue emitiendo ruido más de nueve meses después. ¿Qué están haciendo para atajar el problema de una vez por todas?
- Seguimos muy vigilantes. Ahora es el Gobierno vasco quien debe conceder la licencia medioambiental, mucho más exigente. Oxinorte no puede convertirse en el peor vecino de Lutxana, y vamos a seguir actuando.
- Presentaron un recurso ante la Audiencia Nacional para evitar el viaducto de la Variante Sur Ferroviaria en Gorostiza. ¿Cómo está el proceso?
- No hemos tenido respuesta. La solución es el soterramiento y esperamos que nos escuchen.
- Forman equipo de gobierno con el PSE, con el que han tenido algunas fricciones.
- En el PNV estamos muy acostumbrados a llegar a acuerdos entre diferentes. No hay que tener miedo a la discrepancia. Compartimos un proyecto común y en esa línea nos encontraremos siempre.
- Hace unos meses le tocó pasar por el juzgado como investigada por un supuesto caso de acoso a letrados municipales.
- Estoy encantada de colaborar en la justicia con todo lo que me pregunten, pero no puedo hablar del tema hasta que se resuelva.
- ¿Se ve optando a unas cuartas elecciones?
- Estoy siempre a disposición primero de los baracaldeses y también de mi partido. Tengo el mismo compromiso y la misma ilusión que el primer día.
«Hay que repensar las leyes para que no sean tan paralizantes»
La localidad se ha convertido en la primera de Bizkaia en ser declarada zona tensionada en su totalidad, con lo que se puede topar la subida de los alquileres.
- ¿Cómo cree que afectará?
- Espero que funcione, pero creo que, si la medida no va acompañada de otras que den seguridad jurídica a los propietarios de vivienda para sacarlas al mercado, no lograremos un planteamiento realmente eficaz. Hay que poner en valor las viviendas construidas, no seguir consumiendo suelo, sino hacer que no se queden cerradas y que recuperen la vida con otra familia.
- En su plan de mandato se han comprometido a incrementar la oferta de pisos en alquiler.
- Tenemos proyectos muy importantes, como Sefanitro o El Calero, pero la burocracia es inmensa. La Administración debería repensar las leyes para que no sean tan paralizantes. Nos tenemos que empeñar en poner todas las herramientas para facilitar el acceso a una vivienda y Barakaldo es de las pocas ciudades que emplea recursos municipales para ayudas al alquiler joven.
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