El obispo reconoce el «compromiso» con la «comunidad» de ocho vizcaínas
La Diócesis, en el marco de los actos del 8-M, celebra hoy un evento en Bilbao para destacar la aportación de la mujer a la Iglesia
En Bizkaia hay 591.000 mujeres. Son 43.000 más que hombres. Y, sin embargo, su presencia en los puestos de decisión y su visibilidad ... sigue siendo menor. Para destacar ese trabajo en la sombra, esa dedicación a los demás, la Diócesis de Bilbao reconocerá hoy, con motivo del 8-M, a ocho vizcaínas por su labor diaria. La quinta edición de estos galardones pretende homenajear a mujeres que, «en su servicio diario», realizan acciones vinculadas a promover los «retos fundamentales» de la Iglesia, como «anunciar, celebrar, servir y aportar a la comunidad».
El obispo, Joseba Segura, presidirá a las 12.30 horas el evento, que se celebrará en el salón de actos de la parroquia de El Carmen de Indautxu. «Las ocho representan a otras muchas que están ofreciéndose de manera voluntaria a favor de la comunidad», señalan desde la Diócesis, donde todavía queda trabajo por hacer en materia de igualdad.
En ese pequeño porcentaje figuran algunas de las mujeres que hoy obtendrán reconocimiento por las responsabilidades desempeñadas. Ana María García, que ahora apoya en las celebraciones de la Milagrosa de Zorroza, trabajó en el centro Hargindegi durante 14 años, en el que atendían «a marginados o a prostitutas...». En uno de los vídeos publicados por el Obispado con motivo del homenaje, esta mujer destaca que fue allí donde aprendió «a escuchar, a tolerar; muchas cosas que han servido para mi vida». También aprendió mucho Inma Gallastegi, una de las mujeres con más responsabilidad en la Iglesia fruto de su cercanía con cinco obispos. Fue la secretaria de Uriarte, Larrea, Blázquez, Etxenagusia e Iceta, además de una pionera de la radio en euskera.
Inma Gallastegi ha sido la secretaria de cinco obispos: Uriarte, Larrea, Bláquez, Etxenagusia e Izeta
Ana Rosa Barrios, por su parte, supo encontrar su hueco desde la catequesis tras llegar a Amorebieta procedente de Venezuela, mientras que la joven profesora Olatz Etxezarreta es «acompañante de iniciación cristiana» y aborda «temas que interesan» a niños y jóvenes para que conozcan «qué dice Jesús». Pili García, de Erandio, lleva vinculada a la parroquia desde los años 80. Mari Ángeles Domecq tiene un largo currículo: catequista, trabajó en Kidenda y se fue a Ecuador. Maribel Salcedo, cuando sus hijas ya «iban solas al colegio», pensó que podía «hacer algo». Y comenzó a ser celebrante antes de pasar a Cáritas. La última homenajeada será Maribi Uribe, mercedaria misionera de Berriz que ha permanecido buena parte de su vida «con los pobres de Ecuador».
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