«Estaba sentado en la terraza cuando vino corriendo a por mí con un cuchillo»
Vecinos del barrio de Bengoetxe en Galdakao relatan los insultos y graves amenazas que vienen recibiendo de un okupa en el último mes
El barrio galdakoztarra de Bengoetxe está viviendo unas semanas de nerviosismo e intranquilidad por la agresiva actitud de un okupa que reside junto a un compañero en un edificio abandonado, próximo al puente de Mercadillo. Dos bares de la zona, el Arrien y el Geltoki, así como sus clientes, han sido los principales damnificados en esta situación, en la que ha habido insultos y amenazas con palos y cuchillos. «Tenemos verdadero pánico a lo que pueda pasar», cuentan desde el Geltoki.
El caso viene de lejos. Tres años atrás una de estas personas se instaló en el pabellón. Desde el inicio su actitud fue agresiva con los vecinos y la situación fue degenerando hasta que llegó a intimidar con un cuchillo a dos jóvenes del barrio. Poco después de aquel suceso el hombre desapareció, pero regresó a comienzos del pasado mes de agosto, esta vez acompañado, y ahora es la conducta de este otro individuo, proveniente de Amorebieta, la que está creando numerosos problemas.
«El camino hacia el puente pasa por donde viven y la gente tiene miedo de andar por ahí», señala un vecino. «El día 8 el bar Arrien amaneció lleno de pintura», cuenta una vecina que prefiere no dar su nombre. «Esa vez se fue bien, pero el domingo 24 encontramos de nuevo el bar lleno de pintura amarilla, de las que usan para las carreteras», explica. A pesar de que el servicio de limpieza del Ayuntamiento ayudó con las labores los restos aún se aprecian en el exterior.
Desde ese día los dueños del Arrien junto a algunos vecinos hacen guardia durante toda la noche para evitar que la situación se repita. Uno de ellos, que también ha optado por mantenerse en el anonimato, sufrió directamente el ataque con un cuchillo por parte de uno de los individuos. «Yo estaba sentado en la terraza tranquilamente cuando vino a por mi gritando. Me lanzó una silla y en ese momento se le cayó el cuchillo y se fue corriendo», relata.
En el Geltoki ocurrió una situación similar. «Estaba jugando a la máquina tragaperras cuando se fue la luz y se apagó. Se puso muy violento y nos insultó», cuenta una vecina que presenció los hechos. Pocos días después volvió con un cuchillo. «Nos dijo que había estado muchas veces en la cárcel y que no le importaba volver», señala. «Está afectando al negocio, cada vez viene menos gente, y nadie se sienta en la terraza por miedo», explica.
Desde la asociación de vecinos de Bengoetxe, su presidenta Mari Paz Losada lamenta el efecto que estos incidentes están teniendo en el barrio. «Esta siempre ha sido una zona familiar y tranquila, pero ahora tenemos una verdadera sensación de inseguridad». Por parte del Ayuntamiento destacan que la Policía Municipal «tiene vigilados a ambos individuos» y que se les ha detenido «cada vez que han incumplido la orden de alejamiento» que pesa sobre ellos respecto a los dueños de los bares.