Salba Dalmau
«Las mujeres son las principales transmisoras del euskera»Un vecino de Galdakao ha publicado el libro 'Eziña ekiñez egena' que habla sobre los futuros retos de Euskadi y cómo hacerles frente de cara al siglo XXII
Salba Dalmau nació en Pozokoetxe (Galdakao) en 1946 y desde bien pequeño ha sido un aficionado de la historia y un gran divulgador de la cultura vasca. Su amor por la sociedad de Euskadi le animó a escribir y autoproducir 'Eziña ekiñez egena: para construir la Euskal Herria del XXII', un libro en el que este galdakoztarra propone más de 100 medidas para que la sociedad vasca llegue con fuerza al siguiente siglo
Su título 'Eziña ekiñez egena' no está elegido al azar, se trata de una expresión en euskera que significa 'lo imposible se consigue insistiendo'. Para Dalmau es un lema muy característico del mundo vasco y «revela por qué a día de hoy estamos aquí». «Los vascos no se rinden, nuestros abuelos y padres han trabajado porque la sociedad de Euskadi siga existiendo», destaca el escritor.
Tras toda una vida «empapándose» de la historia del territorio, la pregunta que más se repetía en su cabeza era: «¿Cómo es posible que esta sociedad todavía exista?». «Es un misterio. Después de tantos siglos de conquistas, prohibiciones y limitaciones, seguimos aquí», reflexiona Dalmau.
Esas ganas de conocer Euskadi en profundidad y su preocupación por el futuro de la región le han hecho dar el paso hacia la escritura. En el libro propone más de 100 de medidas para llegar con fuerza al siglo XXII, porque, según este galdakoztarra, el País Vasco está en crisis. «En lo económico hay muchas empresas que se van del territorio», afirma y también insiste en la falta de unidad: «los partidos políticos no se entienden y es imprescindible que lo hagan para que salgamos adelante».
Entre las medidas que plantea está la planificación a largo plazo. «Tienen que juntarse diferentes agentes sociales –representantes de asociaciones, empresas, medios, universidades...– con políticos y elaborar un plan a 25-30 años porque con medidas que cambian cada 4 años no hacemos nada», propone Dalmau.
El tesoro de Euskadi
Otro de los temas que trata en sus páginas es la figura de la mujer. De hecho, le dedica un capítulo entero por considerarla uno de los «tesoros más importantes de Euskadi». Además, el escritor no titubea al declarar con rotundidad que «la transmisión de euskera ha sido principalmente de la mujer». «Tradicionalmente han tenido trabajos más socializados como, por ejemplo, en las escuelas y se han dedicado al mundo rural y eran, principalmente, monolingües de euskera». Para él, estas razones «las ha hecho ser grandes protagonistas de que el idioma continúe a día de hoy».
De cara al futuro también las ve como un agente importante debido a «su estilo más conciliador, de conversar, de empatizar y son más humanas y emocionales». Dalmau cree que «si la mujer vasca se propone que el País Vasco salga adelante, lo hará sin problema».
En el libro trata otros puntos fuertes de Euskadi «por los que debemos estar orgullosos como sociedad». El euskera, el sentido de comunidad que tenemos, la mujer, el deporte, la música, el arte... «Hay que cuidarlos y más protagonismo», sentencia Dalmau.