Ecologistas presentan once alegaciones al proyecto de urbanización de Azbarren

El proyecto que prevé la mayor promoción de vivienda protegida en Azbarren, Basauri, con 340 pisos –de ellos, 245 para alquiler–, ha terminado su consulta pública. A este efecto, Sagarrak Ekologista Taldea ha presentado once alegaciones y, asimismo, ha pedido la convocatoria del consejo asesor de planeamiento, como foro de debate y discusión de propuestas relacionadas con los desafíos urbanísticos que se plantean en la localidad. La asociación ecologista reclama que se «cree vivienda con una lógica y se valoren alternativas».

Entre las alegaciones presentadas, destaca la referida a las viviendas a construir cercanas a las líneas ferroviarias actuales y futuras (Metro, Euskal Trenbide Sarea y mercancías). Para Sagarrak, las medidas propuestas en el proyecto «son muy deficitarias para la lucha contra los límites de la contaminación por ruidos y vibraciones. Desde la administración pública (tanto Ayuntamiento como Visesa) –indican–, este problema lo trasladan a las propias viviendas mediante la propuesta de incorporar mayor nivel de aislamiento en las ventanas del nuevo vecindario».

Una solución que la agrupación considera «injusta» para los habitantes y que «quedará sin resolver; y más en los días de calor y se abran las ventanas para ventilar». Proponen, así, «una revisión de cómo urbanizar para que se pueda vivir de forma saludable y cumpla los límites legales de ruido, con medidas como alargar el cubrimiento de las vías de tren junto con paneles acústicos y muros vegetales».

En cuanto a los bidegorris diseñados en esta actuación, el grupo ecologista considera que el proyecto «modifica y afecta al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y no se justifica adecuadamente, dando prioridad al «'ladrillazo', en este caso al 'murazo' y destrucción de un talud vegetal existente en la calle Kantabria». El Consistorio ha declinado hacer declaraciones

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