La Diputación invierte 3 millones de euros en la carretera que une Zeberio y Artea

La Diputación de Bizkaia da por finalizadas las obras de mejora de la BI-3524 a la altura del tramo que discurre entre Zeberio y Artea. El lugar en el que ha intervenido el ente foral tenía una longitud de 10.260 metros y requería una actuación urgente puesto que sufría un «importante deterioro debido a la falta de drenaje de la carretera y a la propia orografía por lo que presentaba roturas del firme, hundimientos de calzada y desprendimientos», según han informado.

La actuación ha tenido una inversión de 3.097.020 euros y ha consistido en rehabilitar y reforzar el firme. Además, se ha habilitado al vial de un sistema de drenaje mediante cunetas, drenes y nuevas obras de drenaje transversal para evitar que se vuelvan a producir daños. De paso, se ha aprovechado para instalar elementos de contención y se ha actualizado la señalización horizontal, vertical y el balizamiento.

La intervención no era cuestión baladí. De hecho, el plazo estimado para el arreglo del tajo era 18 meses, pero la estimación inicial se ha alargado debido a las «inclemencias meteorológicas y a que ha sido necesario reparar y estabilizar los desprendimientos que se han generado en taludes aledaños a la obra», han explicado fuentes forales. A lo que se ha unido el tener que compatibilizar el desarrollo de los trabajos con el tránsito que discurre por la zona y que ha obligado a cortar el tráfico en algunos momentos en uno de los dos carriles. El mal estado de la vía ha obligado, por ejemplo, a estabilizar ciertos puntos de las márgenes de la propia carretera.

Según han asegurado las mismas fuentes, «en estos momentos» se está tramitando el proyecto de mejora del tramo que une el municipio de Zeberio con el de Ugao- Miraballes. La carretera foral BI-3524 conecta las poblaciones de Ugao- Miraballes y Artea y atraviesa el término municipal de Zeberio. En este segundo caso el proyecto será similar al que se ha ejecutado en los últimos meses, aunque en este tramo la carretera no está inestable. Por tanto, la actuación más necesaria será reforzar el firme, además de mejorar el sistema de drenaje, señalizar y los sistemas de contención y balizamiento.

La carretera es de doble sentido de circulación, aunque con poco trasiego y presenta un trazado con curvas muy cerradas. En la primera intervención no se ha actuado en dos trozos que están cedidos a los ayuntamientos, uno de 840 metros en el barrio de Olatxu y otro de 1.300 metros en el núcleo urbano de Zubialde.