La familia del motorista que chocó con una patrulla en Bilbao pide colaboración ciudadana para esclarecer el accidente
Cualquier testigo que tenga información puede contactar en el teléfono 635 701 010 con los allegados a la víctima, que sigue en estado crítico
La familia del motorista que chocó contra un coche patrulla de la Policía Municipal de Bilbao en la madrugada del sábado solicita colaboración ciudadana para esclarecer el trágico accidente que ha dejado al joven, un vecino de la capital vizcaína de 38 años, en estado crítico. «Necesitamos conocer los detalles, incluso por motivos médicos. No sabemos cómo fue el impacto, si salió despedido, contra qué se golpeó y cómo, cuánto tiempo estuvo en parada cardiorrespiratoria, cuánto tardó en llegar la ambulancia... Son datos que nos han pedido los médicos y no los tenemos», lamentan los allegados a la víctima.
Para recabar cualquier tipo de información la familia ha habilitado un teléfono, el 635 701 010, al que se puede llamar y mandar whatsapps para dar nuevos datos. También la guardia urbana busca testigos de la colisión, ocurrida en la confluencia de las calles Iparragirre y Rodríguez Arias, cuando la patrulla acudía a un aviso por una pelea en la discoteca Moma y el motorista regresaba de su trabajo en Leioa. El joven quedó tendido en el suelo y en parada cardiorrespiratoria por las importantes lesiones sufridas en el impacto, pero pudo ser reanimado por los equipos de emergencia y evacuado al hospital de Cruces. Su estado sigue siendo grave.
La Policía Municipal también ha solicitado las grabaciones de las cámaras instaladas en los comercios de la zona por si pudieran contener imágenes del suceso, mientras avanza en la elaboración del atestado que la familia de la víctima reclama desde el pasado fin de semana. La investigación deberá determinar si el coche patrulla, que viajaba con las señales luminosas y acústicas activadas, pudo haber cometido una imprudencia, o si el motorista pudiera tener algún tipo de responsabilidad.
Indignación
La familia no oculta su indignación con el Ayuntamiento por su tardanza en informarles de lo ocurrido. Según afirman, desde que ocurrió la tragedia, poco antes de las cinco de la mañana del sábado, hasta que les llamó la guardia urbana «pasaron más de seis horas». Los responsables municipales, por su parte, aseguran que tanto el alcalde como la edil de Seguridad contactaron con la madre y el cuñado del herido a última hora del sábado.
