La Pasión Viviente de Durango tendrá tres representaciones con entradas a seis euros
Este miércoles se realizarán los ensayos finales de la XXIX edición, que se desarrollará del 27 al 29 a partir de las nueve de la noche en Santa Ana
Esta Semana Santa Durango será escenario de la XXIX edición de la representación de la Pasión Viviente y Muerte de Cristo, un evento que marca la continuación de una tradición arraigada en la villa y que revive esta emotiva interpretación que congrega a miles de vecinos de la comarca y del resto de Bizkaia.
'Durangoko Pasiñoa' se llevará a cabo los días 27, 28 y 29, con las representaciones programadas para las 21.00 horas en la plaza de Santa Ana. Antes de estos días, hoy y el miércoles se realizarán los ensayos finales en el mismo lugar y horario, brindando la oportunidad para que aquellos interesados en participar se sumen al evento.
En la década de los 90, un grupo de vecinos de la localidad se unieron con la intención de revivir una tradición que se remonta a los años 60, cuando se representó en la localidad entre 1961 y 1965. Tras perderse aquél año y recuperarse casi tres décadas después, esta celebración ha persistido gracias al esfuerzo y dedicación de más de 120 participantes voluntarios que año tras año se comprometen con la producción y realización de este montaje religioso.
Para aquellos que deseen asegurar su asistencia, las entradas –280 cada día– están disponibles para su compra a seis euros en la página web oficial de la celebración (www.durangokopasinoa.com), así como en el bar El Arco y a través del número de teléfono 663 40 25 25.
Labor de voluntarios
La atmósfera única del Arco de Santa Ana proporciona el escenario perfecto para la representación, con un cuidadoso decorado que transporta a los espectadores a otro tiempo. Los participantes, ataviados con trajes de época, encarnan las escenas de la Pasión, reviviendo momentos que resuenan con significado espiritual y cultural. «Este evento cultural es el resultado de un esfuerzo continuado y la constante ilusión de muchas personas que han trabajado arduamente para mantener viva esta tradición. 'Durangoko Pasiñoa' es un acto para los vecinos, impulsado desde el pueblo, en auzolan, llevado a cabo por voluntarios locales que buscan enriquecer la oferta cultural, manteniendo viva nuestra herencia y tradición. Es una oportunidad para promover y potenciar nuestra oferta cultural, atrayendo a visitantes durante la Semana Santa y enriqueciendo la experiencia cultural en el pueblo», destacó la alcaldesa, Mireia Elkoroiribe (PNV), que estuvo acompañada ayer por el director de la representación, Marcos Echarte, así como los intérpretes de los roles principales, Jesús y María, encarnados por Markel Ganboa e Izaskun Astondoa, respectivamente.
«Expresamos nuestra gratitud a todas las personas voluntarias y a la asociación cultural Juan de Iciar por su incansable labor en la organización», explicaron las fuentes municipales.
El director de La Pasión, Marcos Echarte, ha querido agradecer a todas las personas que se han animado a participar en esta obra y hacer posible que, un año más, esto siga hacia adelante, al Ayuntamiento y a la asociación cultural Juan de Iciar por apostar por este espectáculo.
«Nosotros solo somos una pequeña parte de esta Pasión, pero hay mucha más gente detrás de todo esto. Hay vecinos que participan haciendo de pueblo, montando, dando la ropa, desmontando y haciendo otras labores de gestión. Y esas personas son parte esencial y fundamental de esta Pasión, a las cuales quiero agradecerles. Por el esfuerzo, el trabajo, que todos los años sigan manteniendo la pasión e ilusión por sacar esto adelante, por marcar el camino de esta Pasión. Un camino que algunas veces es cuesta arriba, pero que cada año lo vamos superando y sacando hacia adelante», ha analizado.
«Esa pasión que huele a tardes de chocolate»
El joven director durangués, en su tercer año al frente de esta interpretación, ha querido destacar que La Pasión «huele a tardes de chocolate». «A noches de chocolate, bizcochos y de risas, una Pasión que huele a familia y amigos. A emoción e ilusión de 29 años, de lucha constante y sin parar. Fomenta valores, cultura, que valga la redundancia, transmite Pasión. Un largo camino por recorrer, pero que después de una pandemia dura y un parón duro de dos años, fue el chute de energía para seguir caminando, luchando y no rendirnos. Cada años nos seguimos viendo en la plaza de Santa Ana, donde tenemos el privilegio de coincidir todos los años» subrayó, antes de animar a toda la villa a que participen y compartan «estas tardes de Pasión».
Asimismo, los intérpretes de los roles importantes, Jesús y María, encarnados por Markel Ganboa e Izaskun Astondoa, agradecieron la labor de todo el equipo. «Queremos hacer hincapié en que si bien quizás nuestros papeles son los que más brillan y seducen, es imposible hacer esto sin todo el equipo que hay detrás, no solo los 120 vecinos, si no también todas las personas que hay detrás de las cortinas ayudando, dándote un abrazo cuando lo necesitas», confesó el primero. Mientras que Izaskun animó a todos los durangueses a que acudan a ver este espectáculo. «Siempre con mucha ilusión», concluyó.