Dos jóvenes de Barakaldo mueren en un accidente de tráfico en Burgos

Dos jóvenes de Barakaldo de 20 años fallecieron el sábado en un accidente de tráfico que se produjo entre las localidades de Quintana Martín Galíndez y Montejo de Cebas, en el Valle de Tobalina. El 'Renault' que conducían los jóvenes perdió el control en una curva, superó el quitamiedos que estaba a la derecha de la calzada y se empotró contra un gran árbol. Después cayó por un pequeño desnivel y quedó volcado. Desde la Subdelegación del Gobierno en Burgos apuntaron a que la causa del accidente pudo ser la «velocidad inadecuada». Los facultativos que acudieron al lugar del siniestro, en el que ya se produjo otro accidente mortal hace tres años, unicamente pudieron certificar la muerte de los jóvenes.

Los chicos habían acudido a pasar el fin de semana a casa de unos amigos que viven en la localidad burgalesa de Montejo de Cebas, de apenas 40 habitantes, cerca de Frías. El accidente se produjo sobre las once y cuarto de la noche en el kilómetro 2 de la BU-520, una carretera comarcal que lleva años en el punto de mira de los vecinos por los graves accidentes que se registran en su trazado. Los cuatro amigos habían estado en Quintana Martín Galíndez y se dirigían a Montejo de Cebas en dos coches. Según las fuentes consultadas, las víctimas viajaban en un 'Renault' y sus amigos en otro. Fue en ese trayecto cuando ocurrió el accidente. Algunos vecinos afirman que el siniestro se produjo cuando los jóvenes trataban de adelantar a otro vehículo cuando se salieron de la vía. Las dos víctimas llevaban el cinturón de seguridad abrochado, según confirmaron fuentes de la Guardia Civil.

El instituto armado ha abierto una investigación para conocer las causas exactas del accidente. Pero, a la espera de que se realicen nuevas pruebas, el motivo del siniestro pudo deberse a la «velocidad inadecuada» a la que conducían el coche, según informaron ayer desde la Subdelegación del Gobierno en Burgos.

Carlos es un vecino de la zona que se encontró con el siniestro cuando conducía por allí a la mañana. En una conversación con EL CORREO, este hombre asegura que no «ni había rastro de marcas de frenada en el asfalto». Se trata -explica- de una zona de la carretera que traza una ligera curva y en la que «no hay mucha visibilidad». Afirma que el coche superó el quitamiedos antes de impactar de lleno contra un árbol. Después, el 'Renault' se deslizó por una pequeña ladera antes de quedar volcado. «Lo que está claro es que despacio no iban», subraya este vecino.

Los Bomberos de Burgos y los de Miranda de Ebro acudieron al lugar del siniestro para liberar a los dos pasajeros, que habían quedado atrapados en el vehículo. Cuando llegaron al lugar del suceso, los sanitarios del Sacyl sólo pudieron confirmar la muerte de los dos jóvenes vizcaínos.

Ayer los vecinos de Quintana Martín Galíndez y Montejo de Cebas no hablaban de otra cosa. Pero, además de las muestras de dolor por lo ocurrido, muchos residentes criticaban también el estado en el que se encuentra la BU-520. «Cada pocos años tenemos un muerto», lamentaba la responsable de una casa rural de la zona. «Necesita ser arreglada», añade Carlos.

De hecho, hace tres años se produjo otro grave accidente en esta misma carretera, también cerca de la entrada a la localidad de Quintana Martín Galíndez. Las víctimas fueron un joven de 22 años de Huesca, que falleció, y un chico de 20 vecino de Vitoria, que resultó herido. Eran bomberos forestales de la brigada helitransportada de la base de Medina de Pomar. El accidente de tráfico se produjo tras salirse de la vía en una curva de la carretera comarcal y chocar con el guardarraíl.

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