Borrar
Ibon Oregi en un momento de la charla celebrada en Ondarroa. M. Artime
«El coche no cogió bien la curva y nos lanzó por el aire»

«El coche no cogió bien la curva y nos lanzó por el aire»

El subcampeón del mundo de surf adaptado Ibon Oregi, que perdió media pierna al ser atropellado, ha relatado su historia a jóvenes de Ondarroa

Mirari Artime

Miércoles, 12 de marzo 2025, 16:26

El día 1 de octubre de 2020, mientras entrenaba con mi compañero Jokin para preparar la maratón de Valencia cambió mi vida. Un coche, que ni lo vimos ni lo oímos, que venía desde atrás, no cogió bien una curva y nos lanzó por el aire. Gracias a unos setos no caímos al mar», relató ayer en Ondarroa Ibon Oregi, subcampeón del mundo en surf adaptado apenas tres años después de perder media pierna tras ser atropellado mientras corría junto a la N-634, llegando a Getaria.

El deportista, natural de Markina, acercó su testimonio personal ante un auditorio completamente en silencio impactado por la dureza de un relato con la que el Gobierno vasco, en concreto el departamento de Seguridad, persigue sensibilizar sobre todo a los jóvenes de la importancia de la prevención y las conductas responsables en la carretera.

Las dos sesiones de 'Zuk ez duzu ordezkorik–Tú no tienes sustituto–, que tuvieron lugar en la antigua cofradía de pescadores, estuvieron dirigidas a estudiantes de Bachillerato del instituto, así como a los de FP. Es decir a los que en breve tendrán edad para conducir un vehículo o viajarán como acompañantes con amigos.

Oregi, que en 2007 había quedado tercero en el País Vasco en duatlón y un año después comenzó a hacer Ironmans, lo que le valió para llegar al mundial de larga distancia de Hawaii en 2013, les explicó como aquel fatídico día del atropello tenía intención de practicar otra de sus pasiones, el surf.

Pero como hacía mucho viento, decidió salir a correr. Fue una decisión que ha marcado su vida. «Íbamos por el arcén y de repente caímos al otro lado del muro de protección y me encontré en el suelo», detalló.

«Jokin gritaba de dolor. Tenía los brazos rotos. A mí no me dolía nada, la verdad. Le dije 'ahora mismo voy', e intenté levantarme, pero me di cuenta de que no podía mover mi pierna izquierda. Cuando la cogí y la intenté levantar faltaba media pierna. No había nada. El coche se la había llevado consigo», indicó.

«Lo primero que me vino a la cabeza era que no quería morir y no podía perder la consciencia pero llegué a decirle a Jokin que no salía de allí y que me despidiese de mi mujer y los niños», añadió ante los estudiantes. «Parecía una pesadilla, pero era real», matizó Oregi ,que por el relato de su historia en Instagram, le ha valido para ser reconocido como 'Mejor Influencer de Seguridad Vial' por la asociación por la prevención de siniestros y víctimas de tráfico, Aesleme.

Inclusión

«Perder una pierna es muy duro hasta que te das cuenta de que puedes hacer mil cosas», explicó el deportista antes de confesar el complicado camino de la recuperación que le sumió en un negro agujero del que consiguió salir y mirar hacia adelante. «Tras la amputación tuve que reaprender a surfear. Ya no podía hacerlo de pie, así que empecé a hacerlo de rodillas. Ha sido mi terapia», recalcó el doble campeón de España y plata en los últimos mundiales y europeos adaptados de esa disciplina. En la actualidad, el markinarra que reside en Zarautz e imparte charlas dentro del proyecto 'Bizitzaren baloreak, Aparretan bizi' –(Los valores de la vida, vivir en la espuma)–, donde reflexiona e invita a pensar sobre la inclusión en el deporte.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo «El coche no cogió bien la curva y nos lanzó por el aire»