El Mumbrú más eléctrico e íntimo: «¡Quiero luchar por cada punto!»
La ACB coloca un micrófono al técnico del Surne en el partido ante el Gran Canaria. Todo acabó con un «buen partido. ¡Hemos ganado!»
Álex Mumbrú dirigió el partido del domingo contra el Gran Canaria con un 'chivato' que recogió todas sus reacciones y palabras, felicitaciones y enfados, instrucciones ... y consejos formulados a sus jugadores durante un encuentro que acabó con una victoria balsámica. La ACB colocó un micrófono al entrenador del Surne Bilbao Basket, una iniciativa que suele repetir casi todas las semanas con diferentes protagonistas. Esta vez le tocó el turno al barcelonés, quien no se mordió la lengua a lo largo de los 40 minutos de un choque apasionante y resuelto de forma brillante por los bilbaínos. Todo empezó con un saludo con Porfi Fiscac, preparador del conjunto insular, y acabó en el vestuario de los hombres de negro. «Buen partido. ¡Hemos ganado!». Pero antes ha habido muchas más cosas.
🎙 Ayer los compañeros de @ACBCOM le pusieron el micro a nuestro coach @Alexmumbru15. Nuestro entrenador sin filtros y en estado puro 😎pic.twitter.com/sw3oupoJGr
Surne Bilbao Basket 😎 (@bilbaobasket) December 20, 2021
Nada más arrancar el choque, en el segundo uno, Mumbrú dijo a sus ayudantes: «No ganamos ni un salto». El primer ataque era para el Gran Canaria. Enseguida reclamó la atención de Delgado. «Ángel, una canasta muy fácil. Vamos, defiende». Tampoco se despegaba de los árbitros, presionaba más que cuando vestía de corto. «Tú lo has visto, habla con Jorge», trataba de influir en uno de los colegiados para que cambiara la decisión de uno de sus compañeros. El siguiente en ser abordado fue el base serbio Peno. «Stefan, hay que tirarla. Tírala». Tenía para todos y procuraba mantener todo bajo control.
«No te puedes ir del partido»
Uno de los momentos culminantes llegó con la eliminación de Damien Inglis. Un par de protestas acabaron con el francés en el vestuario. «¡No, no, no. No me lo puedo creer. Dani -se dirigía al árbitro Daniel Hierrezuelo-, ¿dos seguidas?». Efectivamente. A la calle. «Tiene que irse al vestuario. Está descalificado», reclamó el colegiado. «No me lo puedo creer», repetía Mumbrú. «La primera técnica es porque le manda, le tira la mano a mi compañero. La segunda es por la conducta conmigo», explicó Hierrezuelo. El técnico catalán habló con el galo. «Escúchame: eres un jugador importante. No te puedes ir del partido. Aunque te piten una técnica no te vuelvas loco». Y luego se dirigió al banquillo. «No habléis con los árbitros. ¡haced vuestro trabajo! Lo único que puede hacernos perder el partido es dejar de hacer nuestro trabajo».
El Bilbao Basket mandaba con autoridad y llegó a ir 30 arriba. Aun así, Mumbrú no quería relajaciones y sus ayudantes le hablaban de la importancia del 'basket average'. «¡Quiero luchar por cada punto!», exigió en un tiempo muerto. También hizo un aparte con Hakanson. «Tienes que tirar cuando tú quieras». Y luego, cuando ya faltaban pocos segundos para el final, se fue donde Alejandro Galán, quien acababa de salir de una lesión de dos meses. «No te voy a sacar. No eres un junior ni estás bien. Se sales es para jugar». Con la victoria en el bolsillo, el catalán entró sonriente al vestuario. Choques de manos y felicitaciones. «Good game (buen partido). We won (hemos ganado)». Y el micro se apagó.
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