El tirador
ANÁLISIS ·
Podemos decir que ha desembarcado en Europa el jugador más parecido al Curry de la NBA
El último triple de Markus Howard desde el rincón más escondido de la pista del Buesa Arena me obliga a reflexionar sobre las complejidades que ... entraña llegar a ese nivel de puntería, aún más importante, a la indestructible confianza de estos privilegiados, para no dudar del éxito que supone la aventura de intentar canastas imposibles. Definitivamente, en su neurología habita algo genético que le permite unir de forma ordenada el movimiento del cuerpo, la inesperada recepción del balón de manos de un compañero, el equilibrio y por último, la mecánica precisa para encestar. Conclusión: Si bien es cierto que un jugador normal mejora con la repetición en largas sesiones de entrenamiento, algunos como Howard no lo necesitan tanto. En los últimos años, solo he conocido dos tiradores como él en la ACB: nuestro Juan Carlos Navarro y el inolvidable Carroll.
En todos los grandes tiradores coinciden aspectos técnicos imprescindibles. Quizás, el más determinante sea unas piernas fuertes sobre las que se construye el lanzamiento. Sin ese valor, el equilibrio se pierde y la puntería desciende. Para poder hacer diez triples por partido con las defensas actuales es menester tener un poderoso tren inferior. Hay grandes lanzadores de pies quietos, precisos cuando están solos, pero dependientes de las situaciones del juego.
Los contrarios saben que Howard te puede matar y aun así lo consigue. Otro importante detalle es la mecánica. En ella coinciden todos los grandes. La parábola de tiro, es decir el arco que describe la pelota, es mucho mayor que la de los tiradores medios. Lógicamente, cuanto más alta es la trayectoria, el aro se hace mayor y las posibilidades de éxito crecen. Podemos decir que ha desembarcado en Europa el jugador más parecido al Stephen Curry de la NBA. El nivel de puntería del nuestro es parecido; el auténtico tiene un poco más de dinamismo con el balón en las manos.
Como en estas líneas he criticado en el pasado algunas decisiones de los responsables técnicos del Baskonia, quiero aprovechar el momento para destacar el mérito que supone descubrir un talento tan grande y sobre todo tan adaptable al baloncesto europeo. Supongo que su paso por Vitoria será efímero. Alguno de los gordos pondrá el dinero para llevárselo. Mientras tanto, a gozar que son dos días.
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