«Me siento un líder en la cancha, ya no soy el chico que era antes»
Luca Vildoza es el MVP de la final de la ACB. El joven base argentino continúa en «una nube» y confiesa que la dura lesión de hombro le ha «cambiado como persona»
Luca Vildoza es especial. Diferente. Conjuga la humildad de un chico que conoce lo complicado que es jugar como las estrellas del baloncesto con las ... que comparte cancha -a las que el martes venció, por cierto- con el desparpajo del que sabe que puede llegar a ser mejor que ellos. Siempre ha dado pistas y ahora, tras liderar al Baskonia en la final de la ACB y ser elegido como el MVP del partido, empieza a confirmar lo que algunos, Alfredo Salazar sobre todo, vieron en él.
El base de Mar del Plata dice que todavía continúa en una nube 15 horas después de ganar el título de liga. «Lo de ayer -por el martes- fue especial...(el silencio engulle las palabras que no llegan a salir de su garganta)... uff». Sigue emocionado y no es para menos. «Voy a seguir en esta nube durante semanas».
-Felicidades Luca. Campeones.
-Campeones sí, ¿qué tal estas?
-¿Yo? Bien. (Esa naturalidad cautiva). Pero los que habéis ganado la liga sois vosotros. ¿Lo vas asimilando?
-Más o menos. Poquito a poco va entrando en mi cabeza. Sigo un poco en la nube y creo que en unos días no voy a bajar de ella. Voy a seguir acá durante semanas.
-Pongamos un rato los pies en el suelo. Dusko. ¿Con qué te quedas de lo que os ha aportado?
-Más allá de lo basquetbolístico, que ha sido mucho, me quedo con lo extra deportivo. Con lo de fuera. La mentalidad que nos puso, las ganas de creer, las ganas de ganar el torneo. Eso es lo que más destaco.
-Os hicisteis fuertes atrás y... Desde fuera, la sensación es que dijisteis al rival: 'nosotros no vamos a perder'.
-Creo que defendimos muy bien. Empezando por Dusko que nos impuso esa agresividad con la que lo hicimos. La confianza que nos transmitía todo el tiempo que estuvimos en Valencia. Todo el equipo creyó que podíamos llegar, que podíamos ganar y el trabajo que hicimos en estos meses anteriores dio su resultado.
¿El nuevo jugador franquicia?
-MVP. Has sido el líder del equipo en el momento justo en el que se decidía el título.
-Sí. Ayer fue un día especial. Creo que estuvimos en una buena efectividad, no por los porcentajes de tiro, que no son buenos, pero convertimos en momentos clave en los que el Barcelona no se sentía seguro. Luego defendimos balones muy importantes... Tuvimos el mérito necesario para llevarnos el juego y poder decir que ¡somos campeones de España!
-¿Y en qué posición te deja eso en el equipo? Tienes contrato hasta 2024, se rumorea la salida de jugadores importantes. ¿Eres el nuevo jugador franquicia del Baskonia?
-No. No debo decir eso. Tengo muchísimas cosas que mejorar. Y el Baskonia lo sabe, los dirigente los saben. Yo voy a seguir esforzándome, dando lo mejor de mí, el 100% y rendir para dar alegrías como ésta a los aficionados. Por lo pronto solo pienso en disfrutar. No se da todos los días algo así.
-Si los rumores sobre la salida de Shengelia y Shields son ciertos, igual no te queda más remedio que dar un paso al frente.
-Todavía no lo sé. El paso llega solo. Trabajando todos lo días como lo venimos haciendo. Todo llega. No hay que apresurarse. Puede haber altibajos en una carrera o que esperen más cosas en un momento determinado, pero el proceso es lento y hay que seguir mejorando y progresando.
-Por olvidarnos de rumores que te colocan fuera del equipo. ¿Estarás en Vitoria la próxima temporada?
-Yo tengo contrato hasta 2024. Por lo pronto, te diré eso.
-¿Y Garino, buen amigo tuyo?
-Lo desconozco. A Pato hacía mucho que no lo veía. Le ví ayer y lo que menos quise fue hablar con él de basket. Quiero que mejore de la rodilla y que pueda reincorporarse a la canchas. Del futuro ya hablaremos más adelante.
«Le debo mucho a Alfredo Salazar, me critica, pero sé que lo hace con cariño y para hacerme crecer»
-Hablemos del pasado, entonces. ¿Cómo ha sido la recuperación solo en casa?
-Hay de destacar al preparador físico. La rutina era entrenar por la mañana para mejorar el hombro. Tenía que ganar músculo para que el dolor fuera desapareciendo. Según fui jugando se fue el dolor y pude disfrutar de estar bien físicamente.
-¿Ivanovic esperó a que se confirmara el regreso a la competición o ya os ponía trabajo antes?
-Dusko tenía en su cabeza que íbamos a jugar y siempre tuvo razón. Nos enviaba vídeos para que viéramos nuestras jugadas, que repasáramos cómo solíamos jugar. Logró que cambiáramos. Antes había partidos en los que nunca se podía ganar tranquilo. O acabábamos quedando por debajo y eso nos ponía nerviosos. Ahora nos refugiamos en la defensa. Hemos cambiado el carácter, la mentalidad es otra. Al final de todos los partidos estamos seguros de nuestro trabajo y de que lo hemos dejado todo.
-En el agradecimiento del MVP hablaste de Alfredo Salazar. Su trabajo rara vez se ve desde fuera.
-A Alfredo no le gusta estar en ningún lado. Se esconde de todo tipo de redes sociales y cámaras. El trabajo que hizo conmigo fue increíble. La confianza que depositó en mí cuando fue a buscarme a Argentina para traerse a un chico que no sabía ni quién era. Le debo muchísimo. Está ahí en todo momento. Tenemos una relación cercana y recibo bastante crítica de él. Sé que lo hace con cariño, porque sabe que tengo margen de mejora y lo escucho con cariño sabiendo todo lo que hizo por mí. Me ayuda a crecer y lo valoro mucho.
-¿Cuáles son tus próximos objetivos?
-No hay. Mi cabeza está ahí arriba todavía. Hemos ganado un título regresando de una lesión jodida y quiero disfrutar, ser feliz. Si el coronavirus me deja ir a Argentina mejor, me haría ilusión ver a mis padres.
-Es como si de cada lesión regresaras más fuerte.
-La verdad es que sufrí bastante. En cada lesión aprendo algo nuevo y ésta me sirvió para crecer como persona. Me siento diferente en la cancha. Más allá de las dobles (las canastas) y la defensa, me siento un líder. Dejé de ser el chico que era antes y me siento un buen jugador.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión