Sin mesas libres y discotecas hasta las ocho de la mañana
En el Goizeko Izarra, uno de los templos bilbaínos del chuletón, podrían llenar hoy hasta «ocho y nueve comedores, todos los que quisiéramos, tanto a ... la mañana como a la noche», mientras que en el Cubita se las ingeniarán para hacer sitio al mayor número de comensales. «Lo del Athletic es brutal. La ciudad se ha vestido de rojo y blanco. Muchos clientes nos están pidiendo que hoy les demos de comer pronto para coger sitio y luego ir a ver la gabarra», comentan Susana Martínez y su hijo, Borja Ramos, al frente del restaurante de moda de Colón de Larreátegui.
De la diversión no solo se ocupan los jugadores rojiblancos, tras la fiesta que se montaron la noche del pasado martes por distintas calles de Bilbao. Algunas discotecas estirarán la jornada, aprovechando las dos horas adicionales que les ha concedido el Ayuntamiento, y trabajarán hasta las ocho de la mañana. Es el caso del Dominante, uno de los clubes que ha agitado la noche bilbaína de tal manera que el aforo de 180 personas se les quedará corto.
Montarán una terraza desde las seis de la tarde, pero prevén que en poco tiempo se les llene el local, igual que sucedió el pasado sábado, «cuando estuvimos a reventar». «Se rompieron más copas que nunca de la gran cantidad de gente que entró», asegura Oscar del Hoyo.
Los hoteles han preparado también un carrusel de fiestas privadas para agasajar a sus invitados VIP, ya que ni siquiera permitirán el acceso a estos festejos exclusivos a los huéspedes alojados en establecimientos como el Vincci Consulado.
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