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No se había respuesto el Athletic del golazo que había anotado Osasuna, una diana fabricada por Moncayola y rematada de manera magistral por Aimar Oroz, ambos relacionados en el pasado con la formación vizcaína, cuando Aitor Paredes y Julen Agirrezabala protagonizaron una tremenda falta de entendimiento. Parecía la diana que 'condenaba' a los bilbaínos hasta que surgió Nico al borde del descanso.
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Javier Ortiz de Lazcano
Penalti a favor de Osasuna en esta acción de Agirrezabala sobre Budimir.
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) January 16, 2025
El croata transformó la pena máxima y puso el 0-2 en el marcador. #LaCopaMola #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/c3fUkqwyW7
Pero vamos a ese error entre los dos compañeros. Pegado a la banda izquierda, Paredes ha tirado hacia el área la pelota ante la presión de un oponente. No se ha dado cuenta, sin embargo, que Budimir no andaba muy lejos de la zona. Tampoco ha estado afinado Agirrezabala, que ha tardado en salir a por la pelota.
En esta indecisión, el portero guipuzcoano ha pegado al croata en la pierna derecha. Al suelo. Penalti, no hay duda. Las caras de los aficionados locales eran un poema. Se acabó, pensaron muchos. Pero apareció el pequeño de los Williams al borde del descanso para recortar distancias.
Poco después, en el intermedio, Ernesto Valverde apostó por sustituir a Paredes por Yeray Álvarez.
Y en el tercer tanto navarro, también hubo un grave error defensivo del Athletic. Primero, un mal rechace de Agirrezabala porque tocó ligeramente la pelota en Nico Williams. Luego, todo el equipo se quedó mirando hasta que Budimir marcó.
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