El Athletic regresa de México con buenas sensaciones: «Hemos competido bien»

«Hemos competido bien», se felicitó el míster rojiblanco al término del encuentro en declaraciones difundidas por los medios oficiales del Athletic. Y, en realidad, la escuadra bilbaína protagonizó un paso adelante, mostró una mejoría, una evolución, si bien es cierto que los 'Rayos', como se conoce al Necaxa, tampoco apretaron tanto como las Chivas, quizá también porque la formación vizcaína no les dejó. Sobresalió, sobre todo lo demás, la puntería de Javier Martón, uno de los dos fichajes de esta temporada. Anotó las dos dianas. A pesar de que existe mucha competencia en su puesto y tiene dificil quedarse en el primer equipo, fue el gran protagonista del encuentro gracias a su facilidad para encontrarse con la portería contraria. No obstante, se produjeron otros destellos en la noche de Aguascalientes contra un rival que estaba más rodado pero no se notó.

El Athletic volvió a ser el Athletic. Mandó en el partido, tuvo la pelota y controló el juego. Cogió la manija del duelo casi desde el pitido inicial, y en esa labor destacaron dos jugadores, Mikel Vesga e Iñigo Ruiz de Galarreta. Ambos se entienden bien, se complementan y aunque es pronto para decirlo, apuntan a ser una pareja de mediocentros muy empleada por Txingurri esta temporada. Además, el eibarrés se mueve bien entre líneas e incluso trata de llegar desde atrás: contó con una buena oportunidad pero no alcanzó la pelota en el área pequeña por un suspiro.

Otra buena noticia, esta sorprendente, es la aparición de Ander Herrera en el centro de la defensa. En una posición en la que los bilbaínos andan faltos de efectivos -en la plantilla solo aparecen Yeray, Paredes, ausentes en México, y Vivian-, el técnico apostó por el bilbaíno para cubrir el puesto. Y no desentonó. Demostró, por supuesto, su calidad con la pelota y se encargó de que el balón saliera con claridad. De hecho, la primera gran ocasión del partido nació de sus botas: conectó con Muniain, más enchufado que el pasado domingo, y este con Nico Williams, que se retiró al borde del descanso con un golpe. Sin embargo, el menor de los hermanos erró ante el meta local. Es cierto que Herrera no sufrió en exceso atrás, pero se mostró atento e incluso se jugó la nariz para despejar la pelota.

Ya en la segunda mitad, con un equipo completamente diferente -salvo Unai Simón que jugó todo el partido y aportó alguna partada salvadora-, destacó por supuesto Martón. Y Unai Gómez. El centrocampista de Bermeo surgió en el corazón del equipo, junto a Vencedor, y ofreció muestras de su precisión en el pase y de su manera de ver el fútbol. Por ejemplo, en la asistencia que le ofreció a su compañero goleador en la segunda diana. En una zona del campo poblada de piezas, el cachorro trata de despuntar y ganarse un dorsal.

De la misma manera, firmó a buen nivel Beñat Prados, que hizo pareja en el centro de la zaga con Nolaskoain. A falta de que la dirección deportiva concrete un fichaje en el eje de la defensa -si es que se produce-, Txingurri realiza un casting. Herrera apareció en la primera mitad, pero en la segunda volvió a tirar de dos futbolistas que regresan de cesión. Y el exjugador del Mirandés provocó una buena impresión, tanto para evitar que los rivales se acercaran al área local como en el momento de mirar hacia arriba. Con todo ello en la maleta y un trofeo, la formación vizcaína aterrizará hoy en Bizkaia, tras un viaje maratoniano, con una sonrisa. Ahora toca descansar un par de días.