El Athletic confía en cerrar el fichaje de Laporte antes del inicio de la Liga

El club de Riad ya lanzó su primer aviso sobre sus intenciones con Laporte cuando le dejó fuera de la pretemporada. Las manifestaciones del técnico portugués significan además el primer reconocimiento por parte de alguien del Al-Nassr de que el central va a salir.

Es una buena noticia para el Athletic. Es evidente que el Al-Nassr no quiere contar con él y eso fortalece la posición del central en la mesa de negociación con su club.

El asunto central en este caso es que Laporte cierre un acuerdo sobre las condiciones de salida del Al-Nassr. Tiene contrato por una campaña más a cambio de 25 millones de euros netos con un club que pagó 27 millones de traspaso al Manchester City por él hace dos años.

Al Athletic le toca esperar. No puede dar un paso hasta que Laporte y Al-Nassr lleguen a un acuerdo. Luego todo será más sencillo porque la voluntad del jugador es regresar al club rojiblanco, tal y como este periódico indicó el 3 de junio cuando reveló que el club rojiblanco había decidido intentar repescarle.

Aunque el tiempo apremia, hay otra buena nueva para el Athletic. El jugador ya sabe quienes son los interlocutores con los que debe negociar.

En apenas unas semanas el Al-Nassr ha cambiado su cúpula. Cristiano Ronaldo, que amagó con irse, ha colocado a tres personas de su máxima confianza al frente del club de Arabia Saudí.

Todos son además compatriotas del portugués. Jorge Jesús fue nombrado entrenador. Fue quien decidió no llevar a Laporte a la pretemporada en Austria y el que le ha colocado el cartel de 'debe salir'.

Luego llegó José Semedo como nuevo director general en sustitución de Majed Jaman Alsorour. El último en caer ha sido del director deportivo, Fernando Hierro. Al-Nassr anunció el lunes que Simao Coutinho, agente de jugadores, es su nuevo director general.

El exinternacional con España paga con su salida su gestión en el fallido fichaje del central David Hancko, señalado como sustituto de Laporte. En una situación insólita, el exjugador del Feyenoord fue rechazado por los saudíes cuando llegó al hotel donde el equipo se hospeda en Austria para la pretemporada. El eslovaco acabó por sumarse al Atlético de Madrid en una operación relámpago. Fue el último episodio de la crisis institucional del Al-Nassr, que quiere relanzar su proyecto.

La primera parte del problema ya está resuelta. Laporte sale sí o sí de Arabia Saudí. Ahora hay que ver en qué condiciones. Hay que resolver si Al-Nassr le da de baja con una compensación económica al jugador o reclama un traspaso por él.

Luego llega el problema de los plazos. Los dos clubes afectados tienen prisa. Los propietarios de los derechos del jugador deben darle salida cuanto antes para no quedarse con un futbolista con el que no cuentan y de ficha altísima. Y al Athletic le apremia el tiempo porque si Laporte era importante hace un mes ahora es imprescindible en medio de la lastimosa situación de la posición de central en el Athletic.

El club rojiblanco decidió ir a por él hace dos meses. Desde entonces, ha sufrido el apartamiento de Yeray tras ser acusado de dopaje por la UEFA, fichó de prisa y corriendo a Egiluz, al que no había renovado, y se encuentra con que central estará un mes de baja tras caer lesionado en el amistoso del miércoles ante el Racing.

Al Athletic le gustaría tener a Laporte a su lado en el comienzo de Liga. En todo caso, la determinación del club de cerrar la operación es tal que está dispuesto a apurar los plazos hasta el cierre de mercado, el sábado 30 de agosto a las 23,59 horas.

Al fin y al cabo, el club tiene muy claro que no ficha a Laporte por sus urgencias del momento, sino que da el paso por su pleno convencimiento de que se trata de un central que eleva de forma significativa el nivel competitivo de la escuadra.