¿Y ahora qué le espera a la junta?
La directiva convocará una asamblea extraordinaria y no puede cobrar cuotas hasta que se apruebe el presupuesto
Los compromisarios han tumbado los presupuestos presentados por la junta directiva de Aitor Elizegi esta mañana en San Mamés. En parte, el problema es ... la cuota covid. ¿Qué ocurrirá ahora? Pues el equipo de gobierno se ve inmerso en un periodo de incertidumbre como ya le ocurrió el pasado mes de diciembre, aunque en esta ocasión condicionada por el anuncio del presidente rojiblanco de que no se presentará a los comicios de 2022, previstos para junio. Es la segunda vez que los compromisarios le tumban los presupuestos -sí han aprobado las cuentas- en una asamblea general ordinaria. En las próximas horas, se sabrá la hoja de ruta. ¿Qué hizo el año pasado? El empresario hostelero tardó casi dos meses en convocar el cónclave extraordinario; otras veces se ha realizado en un periodo de entre siete y nueve semanas después.
Publicidad
A ese segundo cónclave, la directiva se tendrá que presentar con los presupuestos reformulados. Puede optar por un cambio sustancial en una de las cuestiones más controvertidas, la cuota Covid de 120 euros. El año pasado, el gran problema era la petición del 30% de su cuota a los propietarios de un carné por los partidos a puerta cerrada. En febrero, se decidió, como una gran golpe de efecto, no cobrar nada en 2021 a los socios. Eso provocó el incremento de las pérdidas en el presupuesto (7,4 millones), y arrancar dos millones más a la provisión. ¿Qué sucederá ahora? .
Información relacionada
En el pasado, Arrate y Macua, por el contrario, acudieron a la asamblea extraordinaria que les tocó convocar con prácticamente una fotocopia del proyecto rechazado al que añadieron muy pequeños cambios. En ambos casos lo sacaron adelante. El abogado, por ejemplo, sólo sumó el costo del nuevo alquiler del palacio Euskalduna.
El presidente y su junta se ven ahora obligados a reflexionar. Deben medir de nuevo sus pasos porque es evidente que necesitan ganarse el apoyo de los compromisarios; esa cuota no ha gustado. Por el momento, el resultado de este sábado impide al club cobrar las cuotas del año que viene, una gestión que se hubiera llevado a cabo en en breve haberse aprobado los presupuestos. Desde la junta se asume que llegan días en los que deben analizar los pasos a dar. Nunca en la historia una directiva ha perdido dos asambleas en un mismo ejercicio. El varapalo recibido debe provocar que los dirigentes valoren qué hacer si de da ese escenario.
Publicidad
Los Estatutos permiten convocar cuantas asambleas extraordinarias sean necesarias, aunque una segunda derrota colocaría en una situación muy complicada a los dirigentes y pondría en entredicho su continuidad, y más con las elecciones en el horizonte.
Lo habitual en estos casos ha sido que los presidentes se dirijan tras su derrota a los socios con mensajes en los que se insiste en la importancia de aprobar los presupuestos. En los antecedentes anteriores, los compromisarios se han conformado con dar un golpe a una junta para permitirle seguir gobernando tras la segunda asamblea.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión