Agirrezabala, a un paso del Valencia

El guardameta tiene la decisión tomada desde hace semanas y ha comprobado que la apuesta del conjunto ché por hacerse con sus servicios es firme. Está convencido de que necesita la titularidad para dar continuidad al protagonismo que tuvo la pasada campaña y que no tiene asegurado en Bilbao por la presencia del internacional Unai Simón, llamado a jugarlo todo en la Liga y la Champions.

Hay otro movimiento que avala la inminente salida de Agirrezabala hacia la capital del Turia, donde tiene al técnico Carlos Corberán como su máximo valedor –llegó a telefonearle para dejarle claro que era el portero elegido por el cuerpo técnico–. Y es que el rojiblanco Álex Padilla, que cumple seis meses a préstamo en el Pumas, ni siquiera fue convocado para el último amistoso de la pretemporada de la escuadra mexicana y ya prepara su regreso a Bilbao para ponerse a las órdenes de Ernesto Valverde.

La idea inicial era que el futbolista de Zarautz de 21 años permaneciera más tiempo cedido para acumular minutos, pero los rectores de Ibaigane han activado su repesca para cubrir la vacante del que será en breve nuevo portero del Valencia. El Athletic tendrá que compensar a los aztecas con 300.000 euros por Padilla, cuya progresión le ha llevado a ser convocado por la absoluta de México, país de origen de su familia materna.

Las conversaciones para la salida del jugador de Rentería que están a punto de fructificar se han desarrollado en tres fases, con un importante impulso inicial, un estancamiento por el precio, el tipo de cesión y algunos días de incomunicación, y el acelerón definitivo. El Valencia demostró su interés desde el primer momento y ha sido el destino elegido por Agirrezabala, al que también se acercaron el Celta, el Espanyol y el Bournemouth de Andoni Iraola. Quería un préstamo con opción de compra y que el coste fuese inferior a los 15 millones en los que está valorado el guipuzcoano en el mercado.

El Athletic nunca puso pegas a los intereses de su guardameta porque entiende los deseos del portero de dar un nuevo impulso a su carrera, pero barajaba fórmulas distintas y otras cantidades para sellar la operación. Finalmente se ha optado por una cesión con opción de compra no obligatoria. Es decir, se pacta una suma –en eso están los dos clubes para coser los últimos flecos– y la entidad valencianista resolverá al acabar el curso si paga por él para quedárselo o no.

Agirrezabala ha jugado los partidos más importantes en la última campaña y también en la anterior. Fue titular en la final de Copa ganada en La Cartuja –conviene recordar que en el curso 2022-2023 fue de la partida en la semifinal ante Osasuna en San Mamés– y ha sido el número uno de Valverde en la Europa League, incluida la semifinal contra el Manchester United.

En el año del regreso a la Champions –los leones conocerán a sus ocho rivales en la liguilla en el sorteo del 29 de agosto–, Unai Simón está llamado a ser titular indiscutible tanto en el mejor torneo de clubes del mundo como en la Liga. Esto dejaría al de Rentería con la Copa y tal vez la Supercopa, demasiado poco para un portero que siente la necesidad de crecer y de abrazar la regularidad semana a semana después de haberse enfrentado a clubes punteros del Viejo Continente y sostener a sus compañeros en momentos decisivos en el campo.

Los futbolistas del Valencia pasaron el reconocimiento médico de forma escalonada en Paterna la semana pasada y ayer empezaron los entrenamientos. El técnico que obró el milagro la pasada campaña en un equipo que agonizaba cuando lo cogió desea que Agirrezabala se incorpore cuanto antes a la disciplina del grupo para que conozca a sus nuevos compañeros y se adapte al sistema de juego. Los partidos de preparación están a la vuelta de la esquina. El sábado 19 los levantinos se enfrentan al Castellón y cuatro días después al Leganés. El martes 29 el rival será el Olympique de Marsella y, ya en agosto, los futbolistas del conjunto ché se desplazarán a Alemania para medirse al Borussia Mönchengladbach.