Conciertazo de Nogen y ¡en menos de hora y media!

El concierto de Nogen (San Sebastián, 2016), uno de los grupos más populares entre la juventud euskaldun (aunque nos sorprendió que metieran menos gente que Nena Daconte en el mismo escenario la víspera, el domingo), brillaba con atractivo transversal en la noche del lunes, por encima del reggae en la Plaza Nueva con The Twinkle Brothers y muy por encima del transformismo cabaretero de Asier Bilbao, inevitable en La Pérgola año tras año. Este verano Nogen ya han actuado en las fiestas de las tres capitales vascas, pues de manera consecutiva les han contratado para las semanas grandes de Vitoria (en las txosnas), Donostia (en la Plaza Sagües, el escenario principal de la Bella Easo, donde además actuaron Nil Moliner y La La Love You, que también estarán en nuestras jaiak) y en Bilbao (que es lo que les contamos aquí).

A ojo era la séptima vez que veíamos a Nogen en concierto, la tercera en la gira de su tercer disco, 'Åben Cirkel' (23). Les vimos presentándolo en un Kafe Antzokia con el aforo agotado en la venta anticipada y abriendo la Azoka de Durango, donde con entrada libre dejaron a mucha gente sin poder entrar en el Plateruena. Y este lunes en Abandoibarra Nogen dieron un conciertazo que empezó energético y magnético, que no se hundió a mitad del repertorio a pesar de los cambios de formatos y acústicas, y que conectó con la parroquia de varias maneras, sobre todo en sus coros recurrentes oooh-oooohhh.

Ah, y Ane Negueruela, la cantante entre 2016-18 y desde 2022 hasta hoy, estuvo mejor que nunca, no desafinó en los gritos ni en los constantes sostenidos, y no dejó de moverse ni de alzar contenta los brazos. Ane usó dos indumentarias, un traje con chaqueta y el vestido blanco que se puso en el Antzoki y en Durango, y con éste cuando subía los brazos se asemejaba a Marijaia, pero en guapa, claro.

El quinteto, ya muy rodado, apareció con el mismo atrezo (el sofá en medio, las ventanas del fondo…) y cada cual cumplió su papel con naturalidad, desde la chica bajista hasta el chico del ukelele, desde el guitarrista hasta el baterista (sin desmerecer, éste parece el más discreto en su rol). Y como foco de todas las miradas, la dinámica, elegante, morenísima y juvenil Ane, que fue la primera en entrar en escena y que fue quien habló más al público, pero esporádicamente y de manera breve: que si gracias por acudir, que encendiéramos las linternas de los móviles, que cantáramos a tope (esto lo pidió sólo una vez, quizá antes de la última), y poco más.

Por el arranque facturaron pop similar al de los mejores Belako ('Guztia eda ezer ez'), se arrimaron al pop escandinavo que tanto les atrae que se bautizaron 'nogen', que en danés significa 'desnudo' ('Orein'), y a la quinta estalló la influencia de los para ellos muy influyentes Mumford & Sons ('Enarak', cuando en las primeras filas la juventud se puso a corear, a filmar con los móviles y a cantar en círculos que hacían las cuadrillas adolescentes).

Entre la sexta y la novena se sumó al quinteto nuclear otro quinteto de metales, el cual empujó sin pachanga (y con cierto soul) en piezas de folk tipo Lumineers ('Zuek'), de pop new wave ('Mila aldiz') y alguna más en la onda Munford & La MODA ('Ez da ondo aterako'). Luego más coros ooohhh-ohhh pintaron 'Hil arte bizi', Nogen se tranquilizaron a lo The National en 'Oxigenoa', y no se atascaron en la parte acústica, con los cinco sentados en el sofá (y en alguna silla) en un 'Gertu' que cosechó los coros comunitarios, consuetudinarios, y con el dúo entre Ane y Alex ('Galdu duenari').

Nogen actuaban con dinamismo nada teatral, interactuaban entre ellos de modo natural sobre el escenario, y fuera de él sonaba todo muy bien. Y ya desde el tema 14º hasta el último, el 22º, hubo bastantes picos energéticos, por ejemplo 'Zeri begira hartu nahi duzu lo' (con Ane chillando mejor que nunca, los ooohhh comunitarios y el ambiente más festivalero que festivo), la cruda 'Ezpainetan odola' (una versión de los también donostiarras Skakeitan, revisada por Nogen este lunes en plan EzEzEz / Fugazi / The Clash), la cima de la cita que fue 'Summer' (redonda y alegre, como los Arctic Monkeys del principio, cuando eran buenos), la despedida en falso con un tema nuevo redoblado entre La MODA y los Mumford (puede que se titule 'Udaberri', pero esta vez no apostaremos), y ya en el bis un 'Maleta' mejor que Belako (con el verso «no serás tan joven como hoy», o sea que en su repertorio usaron tres idiomas: euskera, inglés y pinceladas de castellano) y la despedida definitiva con la comunitaria y coral 'Nora' (descaradamente Mumford & Sons, ¡hey!).

Todo pasó muy rápido y solo nos queda apuntar que una de las palabras que más usan en sus letras es orain, osea ahora.