Turno para el fondo de armario del Alavés

Tiempo para explorar un fondo de armario que esta temporada parece más amplio. «Tenemos una plantilla de mucha igualdad entre los futbolistas», afirmó el técnico alavesista, seguro de que «juegue quien juegue vamos con todo». Turno para los Guridi, Blanco o Conechny, habituales que fueron suplentes frente al Sevilla. Para los Mouriño, Benavídez, Abde o Asier Villalibre –aún no ha debutado en Mendizorroza–, los menos utilizados en estas cuatro primeras jornadas ligueras. Para Diarra, que lleva tres partidos sin asomarse al césped.

Lo que parece claro es que esta temporada hay más recursos. Benavídez, Blanco y Guridi forman un centro del campo de solvencia garantizada y en punta el Búfalo –buen partido en San Sebastián en su única titularidad– o Kike García aseguran batalla contra la defensa rival. La duda en el ataque es si el entrenador se atreverá a sentar a un jugador en momento dulce como Carlos Vicente, único titular en todas las jornadas junto a Sivera y Abqar.

Más incierta es la línea defensiva, la menos poblada. A priori, teniendo en cuenta que Sedlar sale de lesión grave, puede llegar el debut como titular de Santiago Mouriño. Y deberían tener minutos en los laterales Hugo Novoa, condicionado por las lesiones desde pretemporada, y Moussa Diarra, que no estuvo demasiado fino en sus dos titularidades, en Balaídos y Anoeta.

Lo que está claro es que, asumiendo la dificultad de profanar el estadio blanco, «no tiraremos el partido del Bernabéu, iremos a sumar», como recalcó Joan Jordán después del triunfo ante el Sevilla. Hay plantilla para mantener la competitividad que está mostrando el cuadro vitoriano: la anterior ráfaga de tres partidos en nueve días se saldó con un balance de siete puntos de nueve –empate ante el Betis y victorias consecutivas frente a la Real y Las Palmas–.

Y para modificar los registros del equipo en función de las necesidades de cada partido. Incluso dentro del mismo encuentro: casi la mitad de los goles babazorros, cuatro de nueve, han llegado en la segunda parte de los encuentros. Como suele decir Luis García, no es lo mismo que juegue Villalibre a que lo haga Toni Martínez y el equipo cambia de look si Guridi actúa de 'diez' o de 'ocho'. Y en el Santiago Bernabéu tocará aguantar las lógicas acometidas del equipo que más dispara a portería de toda la Primera División.

Las cifras dicen que el balón será del Real Madrid; no en vano, el blanco es el segundo conjunto con más posesión del campeonato (62%), superado solo por el Barcelona (64%), y el Alavés está a la cola de la categoría en este apartado junto al Espanyol (40%). En este escenario se antoja fundamental el trabajo de presumibles titulares como Benavídez, Blanco y Guridi o la velocidad de atacantes como Abde o Luka Romero, que también pueden tener su oportunidad en el Santiago Bernabéu.

Se trata de «competir y dar lo mejor de nosotros», apuntó Luis García, consciente de que el del coliseo blanco es un «reto difícil» del que solo se puede salir airoso con una versión colectiva sobresaliente. «El año pasado fuimos en un buen momento y nos llevamos cinco (goles)», recordó el técnico albiazul, que nunca ha ganado al Real Madrid en su estadio. Ni siquiera ha puntuado: siete visitas (con Levante, Getafe, Mallorca y Alavés) y siete derrotas, con un balance global 33 goles en contra y solo cuatro a favor.

«El calendario se nos endurece», reflexionó el técnico alavesista. Porque el calendario se comprime, porque afronta dos salidas consecutivas (Real Madrid y Getafe) y porque en tres jornadas se enfrentará a los dos grandes del fútbol español, ya que después de visitar el Coliseum llegará a Mendizorroza el Barcelona.