Alavés 2-0 Las Palmas
Toni Martínez redondea su particular semana fantásticaEl delantero sentencia el duelo ante Las Palmas con un golazo estratosférico, el segundo que marca con la camiseta de Alavés en apenas cincuenta minutos de juego
Llegar, besar el santo y volverlo a besar. Si en Anoeta tardó siete minutos en estrenar su cuenta goleadora, en su puesta de largo en ... Mendizorroza le costó catorce. Si ante la Real, recién llegado y sin entrenar con sus compañeros, habló con Carlos Vicente para pedirle un centro en el área, ante Las Palmas no le hizo falta nadie. Él solito decidió que había que dar carpetazo al partido y se inventó un golazo de esos que perduran durante años en la memoria de la grada. Soberbio zapatazo desde fuera del área para poner el balón en la escuadra de Cillessen, que se estiraba entre la resignación de quien sabe que no va a llegar y la incredulidad que se apoderó de todos los aficionados presentes en el estadio del Paseo de Cervantes.
La llegada de Toni Martínez (San Benito, Murcia; 1997) al Deportivo Alavés lleva aparejada la música épica de una película de Hollywood. Llegó el martes tras una larga noche al volante desde Oporto –compartida con su mujer–, se estrenó con diana el miércoles y ayer, domingo, vivió la experiencia completa de un Mendizorroza entregado desde ya a su causa goleadora.
Ovación a modo de bienvenida nada más poner el pie en el césped –entró por Kike García en el minuto 63–, recado del defensa insular en la primera carrera al espacio y golazo para el recuerdo que sella una victoria importante y redondea su particular semana fantástica. Dos goles en menos de una hora de juego –47 minutos en la estadística oficial–; difícil firmar una carta de presentación mejor cuando uno llega nuevo a un equipo.
«Presentarme así en 'Mendi'... Una cosa es que te lo cuenten y otra es verlo. Estoy muy feliz. Llevo dos ratos con el equipo, prácticamente ni he entrenado, pero como dije el otro día, que llevaba solo un día aquí, me he encontrado un grupo increíble y siento como si llevara tiempo con ellos. Están saliendo para afuera muchas cosas que tenía dentro de estos últimos meses, muchas ganas de mostrar y creo que está saliendo todo redondo», decía el protagonista en los micrófonos de Dazn nada más terminar el encuentro, mientras sus compañeros daban la vuelta al campo recibiendo el calor de la afición.
«Ha sido increíble», aseguraba el delantero, que no quiere ponerse límites. Ni colectivos ni personales. «Yo quiero luchar para ser el máximo goleador de LaLiga», soltó medio en broma medio en serio. Tal es su estado de confianza después de su brutal puesta de largo en Vitoria. «No quiero poner un tope porque sé que cuando llegue voy a querer más. Seguir luchando y ayudando al equipo con goles, asistencias, trabajo como Asier (Villalibre) y Kike (García) y sumar todos, que es lo importante para lograr el objetivo», concluyó.
Salvando las diferencias de los distintos contextos, una explosión goleadora similar a la que vivió Villalibre en su primera etapa en Mendizorroza, en Segunda. Dos goles al Eibar en 28 minutos y otro al Zaragoza en 28 más. El curso pasado, en su primer partido en casa, Kike García firmó un doblete ante el Sevilla. Parece el sino del artillero en el Deportivo Alavés. El vicaíno y el conquense batallarán esta temporada por el puesto de ariete con Toni Martínez.
«Yo quiero luchar por ser el máximo goleador de LaLiga», destaca un punta con la moral por las nubes
Ambos llevan un gol hasta la fecha: Kike marcó en Vigo; Villalibre, de penalti en Anoeta. El Búfalo hizo un buen partido en el derbi, pero su estreno en Mendizorroza –y la consecuente ovación en el retorno al estadio albiazul del héroe del ascenso– debe esperar. Ante el Betis la expulsión de Sedlar varió los cambios finales de Luis García. Frente a Las Palmas el elegido fue Toni y el vizcaíno volvió a quedarse calentando en la banda. Lo que parece claro es que este año hay más pólvora.
En una delantera con mucha competencia y en una segunda linea con mayor amenaza ofensiva. «En la mediapunta hay más gol», reconoce el entrenador albiazul. El de Carlos Vicente, que ha empezado el campeonato como un cohete. O el de Conechny, que, aunque anulado por el VAR por milimétrico fuera de juego, dejó claro que el argentino tiene gol. Y, pese a que el propio técnico insiste en que numéricamente tiene los mismos efectivos, la batería ofensiva de esta temporada ofrece más variantes por el perfil versátil de sus inquilinos.
El mediopunta elegido frente a los canarios fue Stoichkov, cuya movilidad entre líneas y buen juego al espacio, da mucho aire al ataque alavesista. El gaditano, debutante en Primera, hace muchas cosas bien, incluida la asistencia del gol al destacado Carlos Vicente. Y le gusta mucho a Luis García, que ya tiene la anhelada alternativa que le permita desplazar a Guridi a la posición de 'ocho'. Y el azpeitiarra siempre responde, porque, como destacó el propio entrenador, «es tan inteligente que puede jugar bien donde sea, porque lee el fútbol, lo ve muy bien». Un Alavés, en definitiva, más completo.
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