Cesiones a distintas revoluciones en el Alavés

El Alavés lanzó al aire seis de esas monedas en el mercado estival. Con resultados desiguales. A la espera de Giuliano Simeone (Atlético), que reaparecerá en enero después de superar una grave lesión de rodilla sufrida en pretemporada, solo Rafa Marín (Real Madrid) y Samu Omorodion (Atlético), el recambio del delantero argentino, se han hecho con un hueco habitual en los planes de Luis García Plaza. Lo tuvo en su momento Álex Sola (Real Sociedad), no termina de encontrar su sitio Ianis Hagi (Rangers) y lo de Jon Karrikaburu (Real Sociedad), por su protagonismo tan residual, se ha convertido en uno de esos 'expedientes X' de las cesiones que solo tienen una solución en el mercado de invierno.

El primer cedido en el listado de minutos es Marín (996), octavo, impulsado en la jerarquía defensiva por la lesión de Sedlar. El central estaba en ese momento por detrás del serbio y Abqar, pero ha respondido con buena nota a la papeleta de cubrir el profundo hueco que dejaba el balcánico. Solvente, serio. Sin errores de bulto después de aquel de Vigo en la jornada 7. «Lo que más me gustó fue cómo me sobrepuse», recordaba en una entrevista con EL CORREO. Carácter.

Duodécimo está Samu (872), que ya ha superado a Kike García como el delantero más utilizado por Luis García en las primeras 18 jornadas del campeonato. Tiempo suficiente para demostrar de lo que es capaz, generarse ocasiones él solo y desestabilizar defensas con su sola presencia. Pero también para comprobar que, con 19 años, aún le falta poso para definir en los metros finales. Como ante Las Palmas en Mendizorroza. Como contra el Barcelona en Montjuic, donde, como bien apuntó su entrenador, fue protagonista «por la que metió y por la que falló». Buena definición de lo que está siendo hasta la fecha su temporada en el conjunto babazorro.

El central y el delantero son las luces. A partir de ahí empieza el terreno sombrío. Extraño caso el de Álex Sola, decimocuarto en minutos ligueros (623), que a su llegada debutó sin ni siquiera haber entrenado con el equipo, encadenó siete titularidades consecutivas destapándose como un buen regateador y en las últimas siete jornadas únicamente ha jugado 113 minutos. En el último partido, ante el Real Madrid, un error suyo motivó el córner del gol blanco y la llegada de Carlos Vicente le dificultará más aún recuperar su sitio en el once.

Lo de Hagi (553) es diferente. En ningún momento ha encontrado su sitio en el equipo, pese a que Luis García le ha incluido seis veces en el once. Un centrocampista ofensivo de calidad que no termina de enganchar con el juego colectivo, tapado en la rotación por el excelente triángulo que forman Guevara, Blanco y Guridi, pese al déficit rematador del azpeitiarra en la mediapunta. «Hay que recuperarlo y apoyarle», dijo Luis García tras su gris partido ante el Real Madrid.

Muy oscuro, casi negro, son el presente y el futuro de Karrikaburu, que apunta a cesión cortada para que la Real le busque en Segunda –Leganés y Sporting se han interesado– los minutos que no tiene en Vitoria, solo 14 en Liga. El anhelado retorno de Giuliano Simeone, además, le relega definitivamente al fondo del banquillo. El argentino ya entrena con el equipo y es esperado como si de un refuerzo invernal se tratase. Por características –intensidad– y polivalencia –puede actuar detrás del punta–, dará otro aire al ataque alavesista.