El uno a uno del Athletic-Alavés: el mejor, Pacheco

Dio vida al equipo con el penalti parado a Raúl García en el inicio del partido y se mantuvo sobrio en el resto de remates del conjunto rojiblanco, ejerciendo de flotador vitoriano durante muchos minutos del partido. Poco pudo hacer en el gol del Athletic.

Engullido por los desajustes defensivos generales del equipo, pero con acciones de solidez individual en las marcas de las móviles piezas ofensivas del conjunto rojiblanco.

Dio vida al equipo con el penalti parado a Raúl García en el inicio del partido y se mantuvo sobrio en el resto de remates del conjunto rojiblanco, ejerciendo de flotador del conjunto vitoriano durante muchos minutos del partido. Poco pudo hacer en el gol del Athletic, en un córner

Partido gris del canterano, que tuvo problemas con la movilidad de Iker Muniain en su banda y se mostró impreciso en ataque, aunque en la segunda mitad, al menos, tuvo algo de intención por la banda.

Sufrió con el dinamismo del ataque bilbaíno. Berenguer se metía hacia dentro y dejaba el carril libre para las apariciones de Lekue. El engranaje defensivo albiazul no funcionó.

Desapercibido, sin la jerarquía aérea ni la contundencia que había mostrado frente al Atlético de Madrid. Superado en velocidad en sus duelos particulares con Williams, que supo buscar los espacios a su espalda.

Fue el reflejo de la impotencia albiazul, superado en su zona y sin acierto en la distribución. Mezcla acciones positivas con otras negativas, tiene tendencia al desorden y perdió la marca de Raúl García en el gol.

De los pocos salvables del equipo, con criterio cuando pudo tener la pelota, aunque con poco apoyos por delante que dieran continuidad a sus acciones. Está ganando galones en el centro del campo albiazul.

No tuvo su día tampoco, pero su constancia y esfuerzo es de las pocas cosas que se pueden rescatar en el Alavés en este inicio liguero. De su tesón salió una embarullada ocasión en el inicio de la segunda mitad.

Trabajo, pelea y poco más. Tampoco se le puede pedir demasiado en un partido en el que el balón apenas se asomó al ataque albiazul, pero se muestra impreciso en sus apariciones.

Apenas apareció en un ataque alavesista que apenas existió. Mal día para ser delantero en el conjunto albiazul. Volvió a actuar escorado a la banda en tareas defensivas y poco se movió de ahí.

No cambió el rumbo del partido en el centro del campo en la segunda mitad.

Pidió la pelota y lo intentó en el tramo final, aunque no tuvo demasiada fortuna en un ataque deslavazado y desordenado.

Quiso hacer cosas, al menos, en el tramo final y tuvo una ocasión, aunque le falta continuidad en los metros finales.

Desasistido y desafortunado. El Alavés echa de menos a su delantero de referencia.

Salió para reforzar el ataque alavesista en la segunda parte y tuvo presencia, pero no precisión.