"No miraron si había niños, ni nada"

La Policía Nacional trabaja para esclarecer los hechos ocurridos antes y después del encuentro que el Langreo disputó ante el Mérida el pasado domingo, cuando se produjeron diversos enfrentamientos entre seguidores de los dos equipos. Ya se han realizado varias detenciones, de ambas aficiones, y se esperan algunas más a medida que se van identificando a los aficionados implicado. Los detenidos están acusados de desórdenes públicos, tanto por los altercados provocados antes del partido como por los enfrentamientos y destrozos que se produjeron dentro del estadio a la conclusión del encuentro. Fuentes oficiales reconocen que no se puede establecer un número exacto de heridos ya que muchos de ellos no acudieron después de las tanganas a recibir asistencia médica. Sí hubo, en cambio, siete agentes del Cuerpo Nacional de Policía atendidos por heridas leves.

La presidenta de la entidad langreana, Ana Belén Pacho, se mostró disgustada por todo lo sucedido, aunque confía en que el club no reciba ningún tipo de sanción por lo acontecido dentro del estadio. «En el acta no consta nada de eso y todas las cámaras grabaron lo que sucedió. Se ve quién causó los problemas», indicaba ayer la presidenta. Los incidentes se iniciaron en los prolegómenos del encuentro, en las inmediaciones del Ganzábal, cuando los aficionados más radicales del Mérida se encararon ante los seguidores del Langreo que se encontraban allí. «No miraron si había niños, ni nada, empezaron a tirar sillas y a romper cosas, fueron directamente a provocar», afirmó Pacho.

En el parte de desperfectos ocasionados en el sector donde se ubicaba la afición visitante, con numerosas butacas destrozadas, también se incluyó una puerta rota en la zona de los vestuarios. El sentimiento generalizado es el de la falta de seguridad ante un partido de estas características, en el que se había solicitado una mayor presencia policial. «Se pidió a la Delegación de Gobierno y también a la Comisaría, pero los que se vieron allí son los que nos mandaron», se lamentó Pacho.

En el plano deportivo, la directiva trabaja ya para confeccionar una plantilla competitiva y afrontar con garantías el salto a Segunda B. «Esperemos que lleguen refuerzos para mantenernos en la categoría», señaló.