Vitoria despide una Semana Santa «floja» para los restaurantes y con cancelaciones en hoteles

El sector hotelero de la capital alavesa afrontaba estas vacaciones con optimismo y una ocupación cercana al 90%. Sin embargo, han tenido que hacer frente a cancelaciones de última hora. «Sobre todo nos llamaron para anular reservas del jueves y el viernes, el sábado no estuvo tan mal. Pero el balance final es que hemos estado por debajo de lo previsto», sostiene Gema Guillerna, directora del NH Canciller Ayala. Lo que ha llegado es en su inmensa mayoría «turismo nacional», confirma el hotelero Iván Saldaña, que añade que los últimos visitantes han dejado la ciudad este Lunes de Pascua (solo festivo en siete comunidades españolas).

En las barras y en las salas de muchos restaurantes tampoco se ha trabajado con la alegría que esperaban en unas fechas como estas. «Ha sido una Semana Santa más floja que otros años. Hemos trabajado bien en algunos momentos puntuales pero sí que se ha notado menos gente que en ocasiones anteriores», desliza Yosune Menéndez, propietaria del Erkiaga, uno de los templos de la cocina en miniatura en la ciudad. La hostelera reside en Rioja Alavesa y apunta que la zona estaba «a reventar», mientras que en la capital el balance no es para echar cohetes. Dentro de la Semana Santa, eso sí, ha habido días que se ha trabajado mejor; en su caso viernes y sábado. «Pero el tiempo nos ha matado», zanja Yosune. Hay que recordar que la lluvia incluso llegó a provocar la cancelación de las dos principales procesiones que recorren Vitoria: la del Jueves Santo y la del Viernes Santo.

En el caso de Juan Carlos Antolín, responsable de SEA Hostelería además de propietario de locales como la Kobaxa, Kanijo o Kotarro, comparte unas sensaciones que no son del todo positivas. «Ha habido un descenso de la facturación respecto a otras Semanas Santas de los últimos años», afirma en lo relacionado a sus establecimientos. En eso han tenido mucho que ver dos factores: «las terrazas, que apenas hemos podido utilizar por la lluvia, y las noches, que han sido prácticamente nulas». Se confirma también en vacaciones la tendencia a una hostelería cada vez más de día y menos nocturna. «El turismo es más de aprovechar la jornada, recorrerse la ciudad, salir fuera a comer y después irse al hotel», reflexiona Antolín, que también ha notado la 'huida' de muchos vitorianos a otras provincias.

Algo que también han comprobado desde los hoteles es que, además de visitar Vitoria, muchos turistas aprovechan su cercanía a otras capitales como Bilbao, San Sebastián, Logroño o Pamplona para pernoctar aquí pero realizar excursiones de día. Por ejemplo al Guggenheim, a la catedral de Burgos o a alguna bodega de Rioja Alavesa.

Para intentar aprovechar el tirón de los que nos visitan, 178 establecimientos asociados a Gasteiz On han abierto durante las jornadas festivas. «El comentario general es que el tiempo no ha ayudado. Y también que el ticket medio ha sido más bajo», resumen desde la principal asociación de comercio y hostelería de la ciudad. Han realizado una encuesta entre sus asociados que han levantado la persiana en estas 'minivacaciones' y el 60% hace una valoración «regular» o «mala» de las ventas. A pesar de ello, la mayoría asegura que volvería a abrir.

En restaurantes como el Kaskagorri, enclavado en la plaza del Machete, aseguran que «en Semana Santa el tiempo es determinante. Y esta vez no nos ha beneficiado». También han notado que «las noches han sido más tranquilas y durante el día hemos tenido más movimiento». En su sala han dado de comer a catalanes, madrileños, franceses y «más gallegos que otros años». Desde el Dólar apuntan que el único servicio en el que el comedor se llenó fue el del sábado a la noche. «El resto de días hemos trabajado más la barra, el picoteo», apostilla Juan Coreses.

En otros establecimientos hosteleros de la capital alavesa hacen un balance más positivo. Es el caso del Waska!, donde su propietario Carlos Dávalos desliza que «hemos trabajado mejor que el año pasado».