Vecinos del Casco Viejo critican la reforma de la Cuesta porque generará «resbalones» y «rompe la estética»

Por su parte, las nuevas farolas colocadas en el entorno «rompen totalmente con la estética de la zona». Y, en concreto, una de ellas «impacta tapando toda la torre de San Vicente y la farola de siglo XIX», «fastidiando» la postal de esa parte de la 'almendra' medieval. En cuanto a la bajada junto a Los Arquillos, donde ya van tomando forma las terrazas escalonadas, el colectivo recela del nuevo adoquinado y el «aumento del desnivel» con un riesgo «evidente» de resbalarse en toda la zona. Esta renovación también «rompe totalmente con una urbanización tradicional histórica de la ciudad».

El representante vecinal ha criticado asimismo que el acceso a través del nuevo ascensor y las escaleras mecánicas desde la calle Estatuto de Gernika no da ninguna alternativa peatonal «en el caso de que se vaya la luz». Arakama ha lamentado lo que considera una «falta de participación vecinal» en esta obra y ha solicitado que se tomen en cuenta sus quejas. A sus críticas se han sumado las de la asociación Eginarez Eginez, que también ha censurado el recorrido más largo que deberán hacer las personas con discapacidad tras la reforma de la zona, cuyo ascensor «llega trece años tarde», ha reprochado Igor Navarro desde la agrupación.

Y es que las personas en silla de ruedas o con problemas de movilidad se van a ver obligadas a realizar un itinerario de más metros para llegar hasta la 'Cuchi'. En lugar de acceder directamente tras subir por el ascensor o las escaleras mecánicas, ante el desnivel de este punto, deberán ir hasta la entrada de la calle Pintorería y tomar ahí la rampa mecánica para llegar a Cuchillería. Así lo ha explicado desde el gobierno municipal el nuevo concejal de Movilidad y Espacio Público, Raimundo Ruiz de Escudero (PNV). El responsable del Gabinete Urtaran ha argumentado que esa es «la mejor solución técnica».

En general, ha recordado el edil, la actuación permitirá ganar espacio público, eliminar el tráfico en Los Arquillos y «dignificar» la zona, y ha reseñado que para la reforma se ha contado con la participación de vecinos, comerciantes y hosteleros. Respecto al 'graderío', la zona «está proyectada como un lugar de reunión, hay suficiente anchura, la pendiente no es excesiva y transversalmente no es un peligro», ha defendido. La reforma, ha indicado, está previsto que finalice «el 15 de noviembre». «Estaremos atentos a cualquiera de sus aportaciones», ha zanjado.