Los trabajadores de los centros cívicos reciben la orden de pago de sus nóminas

El fin del conflicto laboral que la plantilla mantiene con la empresa Disport, una de las dos empresas que se encargan de prestar distintos servicios relacionados con las actividades deportivas que oferta el Ayuntamiento, parece estar algo más cerca. Después de dos jornadas de paros, que han dejado a miles de vitorianos sin cursillos y sin poder acceder a algunas instalaciones de los centros cívicos de la capital alavesa, la firma ha emitido por fin la orden de pago de sus nóminas. Esta era una de las condiciones sine qua non que los representantes de los trabajadores habían puesto para acabar con la huelga.

Con todo, los representantes sindicales destacan que los trabajadores no habrían recibido todavía sus nóminas, por lo que han decidido mantener la convocatoria de una concentración para este jueves por la tarde a las 17.00 horas en la Plaza de la Virgen Blanca tras la que decidirán si mantienen una huelga que, según los mismos medios, ha alcanzado el 80% de seguimiento en los centros cívicos de Vitoria y de la que responsabilizan al Ayuntamiento por haber adjudicado estos servicios a una firma «que no ofrece las garantías de cobro en tiempo y forma necesarias».

«El Ayuntamiento dice que paga a tiempo y la empresa no hace lo correspondiente, eso nos está llevando a una situación que es insostenible y ya no sabemos qué esperar», denuncian. «Las instituciones y la empresa se pasan la pelota para eximirse de responsabilidad alguna y los trabajadores son los perjudicados», censuran.

Fuentes municipales reconocen que, a día de hoy, no es posible romper el contrato con la adjudicataria. En realidad, son cinco los que se mantienen en vigor, que corresponden a la prestación de distintos servicios en piscinas y otras instalaciones. ¿Y cuándo expiran? Según ha podido confirmar este periódico, algunas de las adjudicaciones finalizan el próximo septiembre y no será hasta «finales de 2025» cuando cese toda relación del Consistorio con esta firma que se encuentra en el punto de mira.