La propuesta «no ofrece novedad» y «debe ser más ambiciosa». Los fondos europeos «desaparecen»

Desde el primero de esos tres grupos, el mayoritario en la bancada de la oposición, Kike Fernández de Pinedo incidió en que el proyecto «no es suficiente» para atender las necesidades del territorio, entre las que prioriza «inversiones en salud y cuidados, transformación socioeconómica, transición energética y entidades locales». Es un proyecto «sin ninguna novedad». Ve «escasa» la dotación para servicios sociales y considera «preocupante» la deuda, «superior a la cuantía del presupuesto, lo que condiciona cualquier política», ya que en torno al 15% del presupuesto total deberá destinarse a su cancelación.

La recaudación récord de las arcas forales en plena escalada de precios que «empobrece» a los alaveses es el punto donde más incide el Partido Popular. «Cuando menos dinero tiene la gente más tienen las administraciones, y ese desequilibrio pasa por bajar impuestos», urge su portavoz, Iñaki Oyarzabal, con la 'guerra' fiscal que enfrenta a Euskadi con Madrid de fondo. «Las inversiones se van. Es momento de rebajar el IRPF», reclama. Pide «planes de reactivación en Vitoria y un mayor refuerzo en mayores dependientes y discapacidad». Los fondos europeos «han desaparecido» de los presupuestos, algo que observa con «muchas dudas».

Respecto a la tercera edad, Elkarrekin Podemos reclama «desbloquear» la negociación de los convenios de residencias privadas. La formación que encabeza David Rodríguez demanda «una apuesta más comprometida» en áreas como las energías renovables «sostenibles», la lucha contra la despoblación o el sector primario. A su juicio la propuesta no aborda problemas más «urgentes» de los alaveses, entre los que sitúan la conciliación y la salud mental.