Grafitis
Pillan a dos grafiteros cuando realizaban una pintada en el centro de Vitoria y a la luz del díaDos policías locales de paisano pasaron a su lado y les identificaron. Se exponen a una multa económica de hasta 600 euros
Andaban dándole al spray en una pared de la calle Diputación, en el centro de Vitoria. A plena luz del día. A la hora ... de la merienda. Tuvieron mala suerte porque una pareja de paisano de la Policía Local pasó por allí, les identificó y ahora se exponen a una multa económica, de hasta 600 euros, o como mínimo, unos trabajos en favor de la comunidad, más limpiar su pintada.
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Al tratarse de un inmueble privado, la normativa establece su acción como «grave». Sin embargo podría haber sido más alta. De haber actuado «en un lugar de vía pública como muros, paredes, estatuas, monumentos y cualquier otro elemento externo, el artículo 149.1 de la Ordenanza de Limpieza se califica esta acción como infracción muy grave», ataja un portavoz autorizado del Gabinete Etxebarria. Esa infracción está calificada como «muy grave», y la cuantía puede ir de los 1.501 euros a los 3.000.
Estos dos grafiteros, sorprendidos la tarde del pasado viernes, son los últimos de la lista negra elaborada por el Ayuntamiento de Vitoria para tratar de atajar esta moda perniciosa. Hay detectadas 6.200 pintadas por los distintos barrios de la capital alavesa e identificados 254 posibles autores.
24.000 euros
Desde hace unos meses, el Ayuntamiento alimenta una base de datos con el propósito de identificar las autorías. En ella hay 2.619 registros, clasificados por dirección, etiquetas y geolocalización. Al margen de estos dos jóvenes hay identificados 22 autores, a los que se han impuesto multas que suman los 24.000 euros.
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El concejal de Gestión Ambiental, el socialista Pascual Borja, señala al respecto que «el universo de los grafiteros en Vitoria es pequeño y todo el mundo se conoce. La apuesta del Ayuntamiento no es la de ir por la vía de la sanción, sino que buscamos enfocarlo desde un punto de vista pedagógico y de reparación de los desperfectos ocasionados con la pintada para que no se vuelva a cometer».
El edil resalta en este punto que «siempre se opta como primera vía por la mediación con ellos, ya que hay ocasiones en la que son menores de edad». Es decir, que sus padres no saben que se dedican a realizar ese tipo de pintadas.
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