En Vitoria
El HUA trabaja a contrarreloj para evitar el cierre de sus cafeteríasLa OSI Araba insiste en que «garantizará» el servicio en Txagorritxu y Santiago, después de que la empresa gestora anunciara que quiere romper el contrato
La actividad en las cafeterías de los hospitales de Txagorritxu y Santiago volvió a ser ayer frenética. La duda está en saber hasta cuándo, ya ... que la empresa Arcasa Grup, subcontratada por Osakidetza para gestionar los dos establecimientos hosteleros, quiere cerrarlos un año antes de lo acordado. Esta situación obliga a los servicios de contratación de Osakidetza a trabajar a contrarreloj para anticiparse a cualquier escenario y evitar, en última instancia, que los locales bajen la persiana.
Publicidad
Porque la decisión de la empresa parece no tener marcha atrás. La firma catalana, con cuarenta años de trayectoria, trasladó a la dirección de la OSI Araba, responsable de las dos sedes del Hospital Universitario Araba (HUA), su intención de cerrar las dos cafeterías por no ser económicamente rentables. Una petición que fue rechazada. «Las empresas subcontratadas están obligadas a mantener la prestación de los servicios hasta que se complete un nuevo proceso de adjudicación», señalaron portavoces de Osakidetza
De manera que Arcasa Grup optó por solicitar un concurso voluntario de acreedores. Ahora será un juez el que decida si acepta la propuesta y disuelve el contrato. Desde el sindicato ELA aseguran que esto se podría resolver «en cualquier momento». Los mismos medios insisten en que «en el caso de que se presentara alguna incidencia se actuará para garantizar la prestación del servicio». No obstante, por el momento no aclaran ni el cómo ni el cuándo. El tiempo es uno de los factores más importantes si finalmente se rompe el contrato. La OSI Araba estaría casi obligada a sacar un pliego de carácter urgente para agilizar los trámites administrativos y evitar que el relevo se dilate en el calendario. Por dos razones: por los 20 trabajadores de las cafeterías y por el servicio que dan a profesionales sanitarios y familiares de pacientes.
Los trabajadores (15 en Txagorritxu y 5 en Santiago) denuncian que se encuentran en una «situación de incertidumbre». Ayer volvieron a su puesto de trabajo, se enfundaron el delantal y atendieron a los consumidores sin saber qué será de ellos en el futuro. Una inquietud a la que suman además los problemas que están teniendo a la hora de cobrar las nóminas, tal y como censuran desde ELA. Y unido a ello, por las consecuencias que tendrían los cierres para los usuarios. A diario, la OSI Araba calcula que se despachan 200 menús, entre desayunos comidas y cenas. Y esto sin contar las consumiciones inmediatas como los cafés o pintxos, lo que concentra gran parte de la actividad.
Publicidad
Hace dos años que Arcasa Grup asumió las riendas del servicio. Y desde ELA reprochan que la adjudicación no garantizaba el futuro del servicio porque firman «con empresas que presentan beneficios muy justos».
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión