González avanza para pactar el presupuesto con EH Bildu ante la parálisis de Elkarrekin

El pacto con la coalición morada sigue siendo el más factible; apenas les separa una mayor implicación de la Administración foral en el convenio colectivo de las residencias privadas. Pero EH Bildu ha recortado claramente las distancias. «Estamos dispuestos a llegar a acuerdos, pero para ello las políticas del Gobierno tienen que tomar otra dirección y lo estamos intentando para conseguir unos presupuestos que garanticen el bienestar de la sociedad», avanzó ayer la portavoz de EH Bildu, Eva López de Arroyabe.

El acuerdo que se negocia ronda entre los seis y los diez millones de euros, después de que en los últimos días se haya logrado superar algunos escollos y abandonar posturas maximalistas. Las prioridades de los soberanistas siguen siendo la vivienda, la creación de plazas públicas en residencias, la denominada transición 'ecosocial' y el aumento de la financiación social. Un aspecto que denota la voluntad por alcanzar un acuerdo es que, a diferencia del PP y Elkarrekin, EH Bildu ni ha registrado ni ha presentado enmiendas parciales al proyecto de cuentas del Ejecutivo, aunque todavía tienen de plazo hasta el lunes a las nueve de la mañana.

En el arranque de la próxima semana aún podrá existir margen para cerrar un acuerdo. Ramiro González y Eva López de Arroyabe se reunieron el miércoles mientras se celebraba el pleno de control en las Juntas Generales y el jueves por la tarde. En estas conversaciones también ha participado la primera teniente de diputado general y la secretaria general del PSE en el territorio, Cristina González. Aparte ha existido un continuo intercambio de propuestas, contraofertas y replanteamientos.

Las negociaciones en la Diputación parecen transcurrir en la misma dirección que en el gobierno vasco, donde EH Bildu mantiene abierta la negociación de las cuentas de Imanol Pradales, mientras que el PP se ha descolgando presentando una enmienda a la totalidad al proyecto. Los populares, que hasta la fecha han sido los socios prefrentes de Ramiro González, han encarecido su apoyo hasta el punto de exigir un «compromiso político» para la reapertura de las Urgencias del Hospital Santiago y que se frene la construcción de un centro de refugiados en el barrio de Arana. Cuestiones que ni el PNV, que ha liderado la reorganización de las urgencias vitorianas, ni el PSE, que defiende el equipamiento para inmigrantes, lo van a apoyar.