«Lo que nos emociona no está en paraísos lejanos, sino al lado»
La poeta Elisa Rueda presenta su nuevo libro 'Las últimas cerezas' mañana a las 19.00 horas en la Casa de Cultura Ignacio Aldecoa
«La emoción no espera escondida en la portada de revista de una agencia de viajes», advierte Elisa Rueda en su nuevo libro. La poeta mira a la naturaleza y a vida, recorre distintos momentos, diversas sensaciones, realidades diferentes y situaciones variadas. El vehículo, y el camino a la vez, es 'Las últimas cerezas' (Palabras al límite), que presenta a partir de hoy (Biblioteca Municipal de Amurrio, 18.30 horas).
Publicidad
Las frutas aparecen en uno de los poemas. «Hice un viaje, con imágenes muy bonitas, y al volver fui a dar un paseo por el pueblo. Ya se había pasado el tiempo de las cerezas, sin embargo quedaban algunas en un árbol, allí escondidas», recuerda la poeta. «No las habían visto los pájaros ni las había cogido nadie», agrega quien sintió mucha emoción al descubrir esas esferitas rojas «que parecía que me esperaban. Me pareció todo un símbolo, un 'carpe diem' y una prueba de que lo que nos emociona no está en paraísos lejanos, sino que lo tienes al lado. La tienes que encontrar en tu vida diaria, no fuera».
La metáfora que impregna las 70 páginas del poemario llegará mañana viernes a la Casa de Cultura Ignacio Aldecoa (19.00 horas). «Con música de Tato Edroso, con instrumentos como cuencos tibetanos, tambor oceánico o flauta, para llevarnos también a la naturaleza, junto a la palabra», explica la impulsora del festival Poetas en Mayo. El sábado llevará el libro a Maeztu y el domingo, al parador de Argomaniz.
La primera parte «habla del tiempo, son poemas descriptivos, pero con un final sorprendente. Lo que estás leyendo no es realmente el mensaje». Además, no siguen las composiciones las dimensiones a las que Rueda ha acostumbrado a sus lectores, con piezas donde «me explayo. Son casi una historia entera», apunta la poeta, que subraya la importancia de «en esta búsqueda constante, saber qué se busca, qué queremos, para reconocerlo si aparece».
«He traducido algunos poemas que ya publiqué en euskera, como 'Zenbat Denbora'»
También hay una mirada social, que se refleja en diferentes poemas, pero que en el caso de 'Repeticiones' «cuando ya tienes una edad ves cosas que se repiten y ya no engañan tan fácil», dice la autora que habla de «palabras nuevas» y «viejas manipulaciones». Lo ya visto también se funde con lo actual en el gran colofón del libro, donde se alternan titulares informattivos y versos que cuentan la historia familiar de la escritora, Casi como en un círculo, viaja de la emigración de sus padres a la marcha de su hijo para «buscar su destino».
Publicidad
Otros asuntos son la sensualidad y el sexo en la parte llamada 'Cerezas marinas'. O el paso del tiempo, en 'Esperando a las cerezas' –«he traducido algunos poemas que publiqué en euskera, como 'Zenbat denbora'»–, sin olvidar la mezcla de nostalgia íntima y cercanía humana a los refugiados en 'El cuchillo'. Pertenece este poema a la parte 'Después de las últimas cerezas', donde 'Definitivamente', todo un clásico de la autora, se erige como la gran declaración de principios, por fin en negro sobre blanco. Sobre todo.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión