Baltasar también llega a los pueblos

La ilusión también prevaleció sobre la crisis sanitaria en los principales municipios de Álava. Salvo Iruña de Oca, Zuia y Oion, el resto de grandes ayuntamientos de la provincia celebró su cabalgata o la limitó a una recepción. Actos marcados por los protocolos de seguridad frente al coronavirus. Pese a las mascarillas, las sonrisas fueron evidentes entre los más pequeños.

Las aglomeraciones fueron inevitables en Llodio ante la expectación por ver a los Reyes Magos, pese a que el recorrido se alargó hasta los dos kilómetros. Las muestras de entusiasmo salpicaron todo el trayecto, reclamando la atención de Sus Majestades, que viajaban a caballo y podían dialogar con los niños que les esperaban en las aceras.

La expectación no bajó ni un solo grado en Amurrio. Pese a la suspensión de la cabalgata, en la plaza Juan de Urrutia se podía respirar la ilusión de los más pequeños mientras esperaban a los Reyes, que se anunciaron con trompetas. Fueron saliendo de uno en uno a saludar y recordaron que los regalos llegarían a todas las casas, aunque este año no ha sido posible hacer la entrega en mano.

Melchor, Gaspar y Baltasar se acordaron de los 'txikis' de Salvatierra que permanecían confinados. Antes de empezar la celebración en la iglesia de Santa María emitieron un mensaje a través de YouTube. «Este año os habéis portado especialmente bien usando la mascarilla y con el lavado de manos. Eso merece un premio», avanzó Melchor desde el altar para regocijo de los pequeños.

Sus Majestades desfilaron por el paseo del Collado de Laguardia y los más pequeños tuvieron que contener la emoción por culpa del ómicron. El Ayuntamiento estableció que tenían que repartirse en grupos de diez personas y debían permanecer estáticos sin perseguir a las carrozas. En Labastida, por su parte, atendieron a los niños en el pórtico del Ayuntamiento, donde después pudieron recoger un paquete de gominolas en vez de celebrar el tradicional reparto de regalos.

Los monarcas llegados desde Oriente fueron madrugadores en la Llanada Alavesa. Antes de que cayese el sol ya habían desfilado por las calles de Alegría hasta llegar a la iglesia, donde escucharon las últimas peticiones de regalos. En Asparrena, mientras tanto, se organizó una recepción en el cine Andra Mari con un horario organizado según franjas de edad.

Los pueblos de Ribera Baja no recibieron la visita de Sus Majestades. El Ayuntamiento preparó una recepción en Rivabellosa con un estricto protocolo. Melchor, Gaspar y Baltasar estaban subidos sobre una tarima, sus pajes dejaban un obsequio sobre una mesa que los 'txikis' podían recoger respetando la distancia de seguridad y en ese momento se podían sentar en un banco para hacerse la fotografía de recuerdo.

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