Nueve empresas de Llodio crean la primera comunidad energética industrial de Álava
Estará en marcha en junio y generará entre el 20 y el 25% de la energía que consumen las impulsoras del proyecto
La primera comunidad energética de carácter industrial alavés ya está en marcha. La integran nueve empresas de la asociación Laudiogroup, que se creó en 2018 ... en Llodio con la intención de agrupar esfuerzos para comercializar sus productos y servicios, desarrollar nuevos proyectos y apoyarse mutuamente. El último reto en el que se han embarcado es generar por sí mismas la energía que consumen, al menos, parte de ella. Para sumar fuerzas ya han constituido la comunidad como tal. Y han solicitado la colaboración del Ente Vasco de la Energía (EVE) para abordar la inversión de 245.000 euros que van a realizar para tener «dos instalaciones fotovoltaicas en las empresas Cuchillas Mariaka y Enkarki con un total de 200 kilovatios», explicó Gorka Aguirre, de Tecoel, portavoz de Laudiogroup. La comparativa resulta más comprensible «si tenemos en cuenta que una vivienda consume unos 4 kilovatios al año».
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La generación de esta energía va a ayudar a las nueve empresas que participan en el proyecto a reducir su factura eléctrica porque «supondrá entre el 20 y el 25% del consumo de cada participante». No solo eso, «respaldará nuestro compromiso con la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono, que es uno de los requisitos que se imponen a diario cuando trabajamos como proveedores», añadió Aguirre.
La generación de este tipo de energía partiendo de las instalaciones fotovoltaicas colocadas en los tejados de las empresas podría estar en funcionamiento para mediados de este mismo año. «Esperamos la respuesta del EVE que podría financiar hasta el 75% de la instalación. En mayo podríamos hacer la licitación para seleccionar a la empresa que se encargará de colocar los paneles y en junio podría estar en marcha», añadió.
Colaboración
La peculiaridad de Laudiogroup, que aglutina a un total de diecisiete empresas de Llodio, es que se trata de una de las pocas agrupaciones de empresas de pequeño y mediano tamaño, que reúne a cerca de 300 trabajadores, a los que habría que sumar otros 800 de Indesa (el Centro Especial de Empleo del Departamento de Servicios Sociales de la Diputación Foral de Álava), que tiene ámbito provincial.
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«Para nosotros es fundamental la colaboración», explicó Aguirre. Este espíritu, que comenzó con la implantación de la fibra en los polígonos industriales, se ha ido ampliando para desarrollar estrategias comerciales conjuntas, participar en ferias y asesorar a los miembros en la búsqueda de ayudas.
También se han constituido en interlocutores con la Administración e implantan políticas de igualdad, pese a no estar obligados porque muchas de ellas no alcanzan los 50 trabajadores. Además, gestionan juntas algunos aspectos de la digitalización y de la agenda de innovación e incluso la gestión de residuos, que redundan en una reducción de costes.
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